Marchena ha amanecido con una sonrisa más amplia de lo habitual. Un rasca de la ONCE, concretamente el X20, ha repartido un premio de 50.000 euros en esta localidad de Sevilla. El afortunado boleto fue vendido en la calle Madre de Dios, gracias a la mano de Pedro Carmona, vendedor habitual de la zona.
"La suerte vino donde estoy siempre desde las 7 de la mañana", comenta Carmona, aún con la emoción visible en su rostro. El vendedor, conocido por muchos en el barrio, suele comenzar su jornada en uno de los bares que también utiliza como punto habitual de venta. "Ya en la faena", como él mismo describe, fue cuando uno de sus clientes adquirió el boleto premiado.
Carmona se ha mostrado visiblemente emocionado por haber sido el canal de esta buena noticia. "Estoy muy contento y orgulloso de poder dar tanta alegría a este barrio", afirma mientras los vecinos le rodean para felicitarlo por su papel en el premio otorgado ayer.
Un premio, una forma de ayudar
Para Pedro, vender un boleto premiado va más allá del azar. “Para mí es una manera de ayudar a los que siempre se acuerdan de ti”, asegura, dejando entrever el vínculo cercano que mantiene con su clientela habitual. Esa conexión diaria con los vecinos hace que, más que una venta, lo sienta como una retribución a una relación de confianza.
La ONCE continúa así dejando su huella en pequeñas localidades, donde premios como este no solo representan una mejora económica para quien lo recibe, sino también un motivo de celebración colectiva para toda la comunidad.


