Sevilla vivió este miércoles una noche de gala en el Cartuja Center CITE, donde los Grammy Latinos rindieron homenaje a la música andaluza. La alfombra roja se llenó de artistas que mostraron la grandeza de este arte, Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, y su fuerza internacional. Fue una cita cargada de música, emoción y orgullo andaluz.
Pero entre el brillo de la fiesta y las actuaciones, el protagonismo se lo llevó un mensaje. Manuel Carrasco, uno de los grandes nombres de la música en España, aprovechó el escenario para alzar la voz por Palestina. Con una guitarra y su particular manera de sentir el flamenco, el onubense convirtió la gala en un espacio de denuncia y compromiso.
"Que acabe el llanto de los niños palestinos"
Carrasco comenzó su intervención con un gesto humilde, reconociendo que no tiene Grammy Latinos. Pero a partir de ahí, su actuación tomó otro rumbo, con guitarra en mano: "Mientras brindan con vino, la hipocresía se engorda. A los líderes del mundo, a los que mueven los hilos, cada cosa por su nombre, da igual el bando, si matan son asesinos".
El público se puso en pie cuando el artista entonó una de las frases más potentes de su repertorio reciente: "Si la política sirve para cambiar los destinos, no sé qué estáis esperando para acabar con el llanto de los niños palestinos". Un alegato breve, pero contundente, que caló en el auditorio y convirtió su actuación en el momento más emotivo de la noche.
Un compromiso que trasciende los escenarios
La intervención de Carrasco fue celebrada por compañeros como Manu Sánchez, que compartió el vídeo en sus redes y lo felicitó con estas palabras: "Valiente, comprometido, justo y necesario. Ojalá muchos como tú".
No es la primera vez que el cantante se pronuncia sobre esta causa. Ya lo hizo en el Santiago Bernabéu, ante 65.000 personas, repitiendo la misma frase que se ha convertido en emblema de su compromiso, al igual que otros muchos artistas que se han posicionado contra el conflicto internacional.