El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Alcalá de Guadaíra, en Sevilla, decretó el pasado viernes la libertad provisional de tres vigilantes de seguridad detenidos por su presunta implicación en la muerte de un hombre en un polígono industrial del municipio. La decisión fue adoptada mientras el juzgado se encuentra en funciones de guardia y fue confirmada por el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía.
Los tres investigados, que fueron arrestados tras el suceso, comparecieron ante el juez y se acogieron a su derecho constitucional a no declarar. La causa abierta se centra, por el momento, en un presunto delito de homicidio, aunque la investigación continúa en fase preliminar. La Fiscalía no solicitó medidas más restrictivas que las acordadas por el magistrado instructor.
Libertad con condiciones
Como parte de las condiciones impuestas, los detenidos deberán comparecer de forma periódica ante el juzgado, tienen prohibido salir del territorio nacional y se les ha retirado el pasaporte. Estas medidas cautelares buscan garantizar su disposición durante el desarrollo de la instrucción judicial.
El juzgado ha recibido ya el informe preliminar de la autopsia, que apunta a una muerte por asfixia mecánica. Está previsto que los investigados puedan ser citados nuevamente a declarar una vez se disponga del informe forense definitivo, lo que permitirá avanzar en la reconstrucción de los hechos y determinar posibles responsabilidades penales.