La organización de consumidores Facua avisaba este lunes de que ha logrado obtener pruebas de que hubo irregularidades en la consulta popular sobre el modelo de Feria de Abril, un proceso participativo del que, por apenas 4.000 sufragios, se decidió recuperar el lunes de Pescaíto y finalizar el actual sistema de sábado a sábado. Una consulta que estuvo "plagada de irregularidades", según Facua.
Esta denuncia no es nueva, aunque ahora, al consultar directamente sobre un caso particular, en las respuestas municipales se constataría esa irregularidad. Ya en aquellos días de votación, Facua insistía en que no había forma de constatar que el voto por móvil era emitido por un ciudadano concreto. Esto abría la puerta a suplantaciones. "Cuando una víctima pregunta qué numeración móvil fue usada para votar en su nombre, la contestación que da el organismo es que, para facilitarle esa información, el afectado debe aclararle cuál fue el código SMS que recibió esa línea para poder votar. Código que obviamente solo poseen el titular de la línea utilizada para la usurpación de identidad y el propio ayuntamiento", denuncia Facua.
Ha sido el propio secretario general, Rubén Sánchez, el que ha ido reclamando al Ayuntamiento información. Éste no ha logrado que se le aclare el dato sobre si se votó desde su propio móvil, y en qué sentido se realizó el voto. Además, desde Facua insisten en que en las primeras horas de votación, la web estaba colapsada, lo que impediría que muchas personas ejercieran este derecho. Con todo, la acusación sobre Facua tiene también otra base, una denuncia sobre posible vulneración del tratamiento de datos personales por parte del Ayuntamiento. De hecho, "no se habilitó un apartado sobre la política de privacidad".
Más allá de si hubo malas intenciones por parte del Ayuntamiento o no, dice Facua, lo que piden es la anulación de la consulta por no tener "ningún mecanismo para detectar estos casos" de posible suplantación "y anular los votos fake".
La respuesta del Ayuntamiento ante este asunto fue muy dura. Amenazó con querellarse contra Facua, exigiendo "que rectifique inmediatamente o le llevará a los tribunales". El delegado de Transformación Digital, Juan Bueno, señalaba que se estaba ensuciando "a trabajadores municipales". "No puede inventar ni acusar de engañar a funcionarios o fedatarios públicos ni puede cuestionar el trabajo de estos empleados con patrañas. Si tiene dudas sobre el proceso realizado va a tener que demostrarlo ante los tribunales". Asimismo, acusan a Facua de estar politizada, cuestionando asimismo "a qué usuarios representa Facua".
Este martes, la batalla entre Ayuntamiento y Facua ha vivido un nuevo episodio. La presidenca de Facua Sevilla, Rocío Algeciras, y el secretario a nivel estatal, Rubén Sánchez, han dado una rueda de prensa donde insisten en las irregularidades y se han revuelto contra la amenaza de querella. "Nos insulta y nos acusa de cometer delitos. Nos parece muy grave", señalaba Algeciras. "Llevamos años demostrando nuestra credibilidad, recurren ahora al insulto".
La cuestión es que la modificación de la ordenanza municipal para cambiar oficialmente la fecha de la Feria. Hay que recordar que esta consulta no es vinculante, porque no tiene categoría de referéndum, sino que, oficialmente, no pasaría en el ámbito legal de ser una encuesta, una consulta, pero que no resta poderes al Ayuntamiento para hacer lo que considere. Y al no tener mayoría absoluta en pleno, el PP necesitaría a al menos un grupo municipal para sacar adelante la reforma que cambie el día del Pescaíto. "No la lleva porque sabe que es una chapuza", y porque el actual no gobierno municipal no lleva cuestiones "que sabe que no tiene apoyos".
"Claro que somos una organización política, pero no partidista", respondía Sánchez a Juan Bueno. "Hacemos política desde 1981. No le gustan a los sucesivos ayuntamientos, ni de izquierdas ni de derechas". Y acusaba al PP de dejarse llevar por "el odio, que empaña la política municipal, deberían escuchar a las organizaciones civiles, somos las tercera organización de Sevilla con más representación después de los sindicatos de clase, con miles de afiliados".
Sánchez ha recordado que desde el PP se le ha acusado de facturas falsas, de lucrarse en el caso de los ERE, o en concreto sobre Juan Bueno, que no impidió la campaña de desprestigio que sufrió en 2014, en años de Alcaldía de Zoido, con carteles en las calles colocados por Ausbanc. "Desde el Ministerio de Sanidad de Ana Mato, se amenazó con ilegalizar a Facua".
Sobre este caso, Sánchez ha pedido "que nos aclare qué quiere que rectifiquemos, qué es falso, le invitamos que nos cite al Ayuntamiento a decirnos a la cara en qué mentimos. Tiene hasta el 22 de octubre de 2025 para interponer denuncia por querellas y calumnias. Y ha inventado que acusamos a funcionarios municipales, y no, acusamos al alcalde, de hacer un sistema zafio y cutre. También lo hizo Juan Espadas, lo que nos pareció igual de mal. Esperamos que se aprenda y en la próxima consulta se haga bien".
Pero, con todo, en el corto plazo, persiste la petición de que se anule la anterior votación. La pregunta es si este envite provocará o no una reacción entre los grupos municipales para pensarse si apoyar en el pleno de noviembre la propuesta de volver al modelo tradicional. Si no lo lleva, o los grupos no dan su apoyo, podría enquistarse el asunto y perder margen para, efectivamente, recortar en 2025 el número de días. Igualmente, desde Facua no quieren tomar partido sobre qué modelo le gusta más. Solo que, insisten, y no se retractan, de que en la consulta hubo irregularidades.


