El escultor Juan Bautista sufrió un ataque en su taller el pasado Domingo de Ramos, hechos que han trascendido hoy. Según relató el propio artista, mientras disfrutaba de las cofradías en la calle, su taller quedó completamente desordenado tras lo que él describe como “un ataque” mientras estaba vacío.
La madre del escultor fue quien descubrió la situación al encontrar la puerta principal abierta de par en par. Al ingresar, constató el desorden generalizado: bocetos rotos esparcidos por el suelo, estanterías y libros revueltos. Afortunadamente, no se reportó robo de objetos de valor, aunque el daño material fue considerable, especialmente en algunas piezas en proceso.
La obra más afectada fue una escultura de Jesús Resucitado, destinada a Huehuetenango, Guatemala. Bautista explicó: “La imagen apareció con cortes de sierra, cabeza mutilada, pies destrozados y brazos cercenados que después no aparecieron”. La pieza se encontraba en fase de modelado avanzado y el daño supone un contratiempo importante para el proyecto.
Siete meses de investigación
La Policía acudió al lugar e inició la investigación, aunque hasta la fecha no se ha obtenido una respuesta concreta. El escultor manifestó su preocupación por la falta de avances en el caso, que ya acumula siete meses desde el incidente, y señaló que aún no se han identificado sospechosos ni se conoce la motivación detrás del ataque.
A pesar de los daños, Bautista continúa con su trabajo y ha informado que la escultura de Jesús Resucitado se encuentra actualmente en su fase final de policromía. El artista confía en poder entregar la obra a principios del próximo año 2026, cumpliendo así con los compromisos adquiridos con sus destinatarios en Guatemala.