Hasta tres órdenes de búsqueda acumulaba tras más de dos años fugado de la justicia. En vigor estaba una orden de búsqueda y detención por delitos relacionados con el narcotráfico, así como otra de ingreso en prisión. Durante la mayor parte el día permanecía escondido y solo salía en motocicleta, ocultándose con cascos y tomando todo tipo de precauciones. Finalmente, su huida ha finalizado.
Agentes de la Policía Nacional, dentro del marco de la Operación Brezo desarrollada en Sanlúcar de Barrameda, han tenido a este conocido narcotraficante de 41 años de edad. Tras las dificultades para su detención, los efectivos policiales desarrollaron un dispositivo de búsqueda que permitió localizar la vivienda donde se refugiaba. Una vez concedida la pertinente autorización judicial, accedieron al domicilio, donde se produjo la detención. El individuo llevaba quince meses escondido tras haber participado en diversas fugas.
El detenido empleaba dicho inmueble para la producción de marihuana. Contaba con un completo y elaborado sistema que abarcaba desde la producción de esquejes hasta el cultivo y recolección final de los cogollos de marihuana. Toda la infraestructura fue desmantelada y también le fueron incautadas varias tabletas de hachís.
Esta actuación se enmarca en el Plan Especial del Campo de Gibraltar, en la variedad de lucha contra la producción de marihuana. Durante el mes de noviembre la Policía Nacional de Sanlúcar de Barrameda ha intensificado sus actuaciones. Se han detectado innumerables problemas en distintas localidades del territorio nacional por la proliferación de plantaciones, todas las cuales consumen ingentes cantidades de electricidad, que obtienen mediante enganches ilegales. Ello produce sobrecargas en el sistema eléctrico y, como consecuencia, numerosas averías y pérdidas del suministro. Como medida preventiva, se ha intensificado el control de esta actividad delictiva.
En los dispositivos desarrollados durante dos semanas, se han logrado detectar y desmantelar cinco plantaciones, instaladas en domicilios particulares y “enganchadas” ilícitamente al suministro eléctrico público. La actuación policial ha suprimido todas las acometidas ilegales e imputado a los encartados un nuevo delito de defraudación de fluido eléctrico.
En total se han incautado de 1.553 plantas de marihuana y 6.608 esquejes, que arrojan un peso total de 137 kilos, la mayor parte de ellas en su estado final de crecimiento, próximas a su corte. Además, se ha dado con toda la infraestructura necesaria para la actividad ilícita, lámparas, balastros, aires acondicionados y maquinaria de refrigeración.
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