Con profundo pesar, Trebujena (Cádiz) llora la muerte de Juana Bustillos Jiménez, una vecina cuya historia forma parte inseparable de la memoria colectiva del municipio. Su nombre quedará ligado para siempre al establecimiento La Oña –como era conocida Juana–, un negocio familiar que durante 85 años –cerró hace unas semanas definitivamente– fue punto de encuentro y referencia diaria para generaciones de trebujeneros.
El pequeño comercio, abierto los 365 días del año, se convirtió en un símbolo de cercanía, trabajo y constancia. Su carácter ininterrumpido y su espíritu de servicio hicieron de La Oña algo más que una tienda.
Mujer Rural del Año
En 2020, Juana Bustillos fue distinguida por la Delegación de Igualdad como Mujer Rural del Año, un reconocimiento merecido a una vida dedicada por completo al esfuerzo, la superación y el compromiso con su comunidad. Aquella distinción subrayó su papel como emprendedora y trabajadora incansable, valores que marcaron su trayectoria personal y profesional.
El cariño de Trebujena hacia La Oña quedó inmortalizado también en el parque público que lleva su nombre, un gesto de gratitud hacia quien dedicó su vida a su pueblo. Ese espacio, hoy lleno de vida, simboliza el legado de una mujer que supo unir generaciones a través de su ejemplo y su entrega.
“Una gran trabajadora siempre currando en el pueblo. Le decíamos la tienda de los desavíos, siempre abierto y nunca ponía mala cara”, “mujer incansable, muy querida por todos. Siempre será recordada, otra estrella qué brillará siempre”, “una gran luchadora, una mujer empoderada Siempre estará en nuestro pensamiento. Mi más sentido pésame a toda la familia” o “una referencia para el pueblo de Trebujena y una luchadora”, han sido algunos de los mensajes de vecinos y amistades de Juana tras la muerte de esta trebujenera de pro.