La Guardia Civil de Cádiz ha desarticulado un clan familiar asentado en Medina Sidonia que utilizaba sus domicilios como puntos de venta y consumo de drogas. En la operación fueron detenidas seis personas e investigada una séptima, todas con antecedentes por delitos similares. La investigación se centró en hechos ocurridos durante el pasado mes de junio.
El origen de la investigación se remonta a varios meses atrás, cuando los agentes recibieron información sobre varias viviendas del núcleo urbano que podrían estar funcionando como 'narcopisos' debido a la constante afluencia de toxicómanos. Las autoridades iniciaron entonces un seguimiento discreto y prolongado de estas residencias.
Los operativos detectaron que el clan estaba compuesto por seis miembros de una misma familia que residían en la localidad. Las viviendas implicadas estaban interconectadas y cada integrante asumía un rol específico dentro de la estructura delictiva, coordinando la venta y el consumo de estupefacientes.
Durante la investigación se constató que los domicilios estaban frecuentados durante las 24 horas por consumidores de heroína, cocaína y hachís, que podían adquirir y consumir la droga en el interior de las viviendas. Esta actividad generó alarma social entre los vecinos, que denunciaban altercados y agresiones incluso frente a menores y colegios cercanos.
"Telecoca"
El modus operandi del grupo consistía en la elaboración, envasado y venta directa de las drogas desde los domicilios, facilitando también su consumo en el lugar para evitar ser detectados en la vía pública. Además, empleaban el sistema conocido como "telecoca", con repartos a domicilio o en espacios públicos para clientes habituales.
El primer registro se llevó a cabo en junio en una de las viviendas, donde se incautaron cocaína, heroína, hachís, marihuana y diversas armas blancas y prohibidas utilizadas para proteger las sustancias. La operación concluyó el 21 de noviembre con un segundo registro, en el que se intervinieron 65 dosis de cocaína mezclada con heroína, cocaína pura, hachís, marihuana, dinero en efectivo, uniformes de Policía Local y utensilios para la manipulación de drogas.
Como resultado de las actuaciones, seis personas fueron detenidas y una más investigada, de las cuales tres ingresaron en prisión preventiva. La Guardia Civil destacó la complejidad de la operación debido a los sistemas de vigilancia que la organización había instalado para controlar la presencia policial en los domicilios.