Olvera da un paso adelante en su propuesta turística implementando las fiestas navideñas. Lejos de ‘inventar’ grandiosos atractivos, el gran valor se localiza en la participación de sus habitantes y en usar su maravilloso casco antiguo y su entorno excepcional como un escenario singular para el desarrollo de actividades, junto a una decoración que llama poderosamente la atención.
Se trata de seguir haciendo realidad el eslogan Olvera, un pueblo de postal también en Navidad. Las fiestas serán una forma más de enseñar los atractivos de esta preciosa localidad de la serranía cuyo entramado urbano pasa por ser uno de los mas apreciados y valorados a escala nacional e internacional.
El Ayuntamiento se traza como objetivo cuidar la imagen de la localidad también en este ciclo festivo, de tal forma que el visitante la elija para disfrutar de ella durante varios días. Dos son las citas más sobresalientes: el Mercado y el Belén viviente. El primero tiene lugar en la principal arteria comercial mientras que el segundo ocupa buena parte del casco antiguo por donde se reparten las diferentes escenas del nacimiento.
Otro ingrediente excepcional es la decoración. Nos sorprenderá ver farolas, monumentos y otros elementos del mobiliario urbano ‘vestidos’ con piezas de croché o de punto, elaborados por olvereños. O elementos artesanales como banderolas también de croché. Todo esto supone una aportación fundamental y diferente para el embellecimiento de sus calles y, por ende, de la Navidad singular que propone Olvera.
Un dato, en Olvera se puede ver del árbol de Navidad hecho de croché más grande que existe. Del mismo modo, el Belén viviente es una experiencia compartida. Decenas de personas se ocupan de dar vida a cada uno de los pasajes que se ocupan de instalar y de recrear por parte de diferentes asociaciones locales que se esmeran en cada una de las ‘estaciones’ que les corresponden.
Todo este impulso a la Navidad viene desde que la localidad consiguió ser nombrada como Capital del Turismo Rural, “que nos colocó en el mapa y lo que supuso ese reconocimiento para el impulso turístico”, explican desde el Ayuntamiento como causa por la que se decidió implementar estas fiestas.
Otra propuesta para los que deseen estar en Olvera y quedarse unos días viviendo la Navidad es el Mercado, ya de por sí sumamente interesante en productos locales y artesanía. Para darle un toque diferente, se desarrolla el ‘rally’ de compras consistente en que el día 9 de diciembre, que se abre el Mercado, se pone en marcha este concurso. Se puede participar mediante bonos que se ofrecen en las tiendas y puestos del mercado. Se lleva a cabo un sorteo y el elegido participará en una carrera de compras en el Mercado Navideño con la obligación de gastar el importe conseguido en media hora. Son dos los sorteos y los premios: 600 y 400 euros.
“Es una fiesta muy participada por los vecinos tanto en la decoración como por los mismos comercios que sacan a la calle del Mercado un puesto con sus productos”, señala el Consistorio; productos como el aceite, queso, chacinas, etcétera.. “todo artesanal de aquí e incluso venidos de otras localidades y provincias limítrofes”.
El programa navideño es el siguiente:
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