El Sindicato de Enfermería Satse en Andalucía ha advertido de una fuerte saturación en los centros sanitarios de las zonas costeras, que considera una de las más graves de los últimos años. La organización señala que la afluencia de población durante la temporada alta puede multiplicarse por tres o incluso por cinco en algunos municipios, mientras que los refuerzos de personal resultan insuficientes y en muchos casos no se cubren las incidencias.
Según el sindicato, la situación está directamente relacionada con la falta de recursos humanos, ya que las bolsas de contratación se encuentran prácticamente agotadas. Esto está provocando que numerosos centros de atención primaria y hospitales de la comunidad autónoma tengan que afrontar un incremento de la demanda con plantillas muy reducidas.
Según Satse, en el Hospital San Carlos de San Fernando, la presión asistencial ha derivado en un colapso en las urgencias, donde pacientes permanecen hasta 48 horas a la espera de ser ingresados ante la ausencia de camas disponibles. Satse apunta que este escenario se agrava por la existencia de plantas cerradas por falta de personal.
La Junta desmiente al sindicato
La Junta de Andalucía ha ofrecido su versión asegurando que el Servicio de Urgencias del Hospital de San Carlos, en San Fernando, funciona con normalidad, según la información recibida de la Dirección del Complejo Hospitalario Puerta del Mar-San Carlos. El Gobierno andaluz ha asegurado que el plan de verano del Servicio Andaluz de Salud avanza conforme a lo previsto y que la asistencia sanitaria está garantizada en la provincia. En el caso concreto del hospital isleño, se ha indicado que este jueves había camas disponibles para atender la demanda, en respuesta a la denuncia del sindicato de enfermería Satse, que había advertido de un colapso en las urgencias por la reducción de personal y la falta de camas.
La administración autonómica detalló que el Plan de Verano 2025 contempla 5.820 contrataciones en Cádiz para cubrir las vacaciones del personal sanitario. No obstante, admitió la existencia de incidencias no programadas, como bajas laborales en momentos puntuales, que en ocasiones no pueden cubrirse de manera inmediata, especialmente en jornadas de fin de semana o en turnos de noche.


