La Parroquia de Nuestra Señora de Fátima, en El Colorado (Conil de la Frontera), ha sufrido el robo de la pequeña imagen de piedra conocida como la Virgen de la Gruta durante la pasada noche. La desaparición fue detectada por el párroco del templo, el Padre Jorge, Jerzy Paczuski, quien vive en el recinto y se percató de inmediato de que la figura había desaparecido.
En declaraciones a Radio Juventud de Conil, María del Mar López, responsable de Cáritas en la parroquia, explicó cómo se descubrió el robo: "Esta mañana me comentaba el padre que cuando bajó y se acercó como cada día, se encontró con que faltaba la Virgen. Y yo decía, ¿pero cómo es posible?". López aclaró que no se registraron destrozos en la zona: "Nada, simplemente han sacado la Virgen. Las macetas están todas en su sitio, todo tal cual, simplemente se llevaron la Virgen".
Una imagen donada por Pepi Madero
La imagen había sido donada por su anterior propietaria, Pepi Madero, quien la conservaba en su jardín antes de entregarla a la parroquia. Según López, el Padre Jorge, al verla, se enamoró de la figura y decidió colocarla en la fuente del patio exterior del recinto, donde se había convertido en protagonista de las procesiones que se celebraban cada día 13 de mes desde mayo. "La puso muy bonita, el 13 de cada mes se sacaba en procesión. Nos sorprendió a todos este robo porque no es una Virgen ligera; quien vino, venía preparado para llevársela", narró López.
El robo ha causado consternación entre los fieles y vecinos del barrio. La Virgen de la Gruta, además de su valor religioso, representa un vínculo afectivo con la comunidad y la historia reciente de la parroquia. María del Mar López detalló que los ladrones aprovecharon que la puerta pequeña del recinto había quedado abierta, y que aparentemente actuaron de manera planificada, sin causar daños materiales: "No hay destrozos, nada roto; simplemente se llevaron la Virgen".
A la espera de interponer la denuncia
La parroquia ya tiene previsto interponer la denuncia correspondiente y ha solicitado la colaboración de los vecinos para intentar localizar la imagen. López concluyó con un mensaje dirigido a la comunidad: "Si alguien ha visto o escuchado algo que pueda ayudarnos a localizarla, que lo diga. Lamentamos muchísimo este hecho, hay cosas que no tienen explicación".
El robo ha generado una profunda tristeza entre los feligreses, que esperan recuperar la imagen y devolverla a su lugar en la parroquia, donde seguirá siendo un símbolo de devoción y un recuerdo vivo de la participación y cariño de la comunidad.



