La provincia de Cádiz cuenta con uno de los radares más temidos y activos de toda España. Lo confirma un reciente informe elaborado por Automovilistas Europeos Asociados (AEA), que analiza la actividad sancionadora de los radares fijos de la Dirección General de Tráfico (DGT) durante el pasado año 2024.
El dispositivo en cuestión se encuentra en un punto aparentemente discreto: kilómetro 74,7 de la autovía A-381, en sentido creciente hacia Los Barrios. Sin embargo, sus cifras no han pasado desapercibidas: formuló un total de 54.835 denuncias por exceso de velocidad, lo que supone un incremento de más del 1.400% respecto a 2023. Es decir, multiplicó por más de catorce el número de sanciones.
Este radar se ha situado así entre los cinco más multones del país, compartiendo el ranking con históricos como el del kilómetro 20 de la M-40 en Madrid (74.873 denuncias) o el del kilómetro 968 de la A-7 en Málaga (67.502 denuncias).
Una lluvia de multas en plena autovía
La A-381 conecta Jerez con Los Barrios y atraviesa una zona de tráfico fluido, con buena visibilidad y velocidad autorizada elevada. Sin embargo, en ese punto concreto —y sin una señalización llamativa para muchos conductores— el radar ha sido especialmente prolífico.
Desde AEA advierten de que el dispositivo gaditano es uno de los que más ha incrementado su actividad en todo el territorio nacional. De hecho, el informe destaca solo tres radares con aumentos espectaculares: el de la A-4 en Jaén, que pasó de 2 denuncias a más de 24.000; el de la A-1 en Burgos, con un salto del 500%; y este de la A-381 en Cádiz, que ha irrumpido en el ranking tras su explosión de actividad.
Andalucía, líder en sanciones por radar
Andalucía sigue siendo la comunidad con más radares activos y más sanciones emitidas: un total de 959.592 denuncias en 2024, lo que supone el 27,8% de todas las multas por velocidad formuladas en España. Muy por delante de Castilla y León (12%), Comunidad Valenciana (10,6%) o Castilla-La Mancha (9%).
En conjunto, los radares de la DGT emitieron el año pasado 3.440.655 denuncias, unas 10.000 cada día, según los datos oficiales analizados por AEA. Solo 50 radares, de los más de 1.000 que tiene la DGT desplegados, fueron responsables de más del 30% del total de multas por exceso de velocidad.
¿Seguridad o afán recaudatorio?
Ante estas cifras, el presidente de Automovilistas Europeos Asociados, Mario Arnaldo, lanza una crítica directa a la política de la DGT. "La mayoría de las denuncias se formulan en autovías y autopistas, no en carreteras secundarias, que es donde se produce el 70% de los accidentes con víctimas", señala. En su opinión, los radares "se están convirtiendo en instrumentos de recaudación, no de prevención".
La cuestión no es nueva, pero vuelve a estar sobre la mesa tras conocerse el alto rendimiento sancionador de ciertos dispositivos, como el radar de la A-381 en Cádiz, que ha pasado prácticamente inadvertido durante años y ahora irrumpe con fuerza.
