Una noche increíble: la aurora boreal, visible desde la provincia de Cádiz en un fenómeno histórico

Una fuerte tormenta solar provoca que partículas con carga electromagnética crucen la magnetosfera en muchos puntos del hemisferio Norte, incluido Andalucía

La aurora boreal, vista desde la provincia de Cádiz, en El Puerto, en una imagen de Juan José Grado.
11 de mayo de 2024 a las 10:28h

Un fenómeno que no es fácil de comprender, pero que se ha hecho visible y evidente, el de las auroras boreales. Una tormenta solar detectada este 8 de mayo ha provocado que en las últimas horas, en la noche del 10 de mayo y la madrugada de este sábado, se produzca un espectáculo de luces propio de zonas mucho más cercanas a los polos.

En concreto, las auroras boreales son partículas solares con carga electromagnética que si superan la magnetosfera -la capa que protege a la tierra de la radiación, como una atmósfera invisible- se manifiesta en forma de luces rosáceas, visibles durante la noche.

Al producirse una importante tormenta solar iniciada hace dos días, esas partículas han recorrido nuestro sistema desde el sol hasta la tierra, provocando que esas partículas crucen con más fuerza de lo habitual la magnetosfera en zonas donde raramente lo hacen. En varios puntos del hemisferio norte, esas partículas electromagnéticas han tocado de lleno, provocando que las auroras boreales sean visibles desde puntos como la provincia de Cádiz.

El novillero Juan José Grado tomaba una imagen la pasada noche desde El Puerto de Santa María que evidencia este fenómeno, que también se ha manifestado con fuerza en diversos puntos de Europa. 

El observatorio de Calar Alto, en Almería, también ha tomado imágenes, si bien con la mala suerte de que había nubes.

En ese sentido, hay que recordar que el riesgo de las tormentas solares es que afecte a la tecnología. En una escala de nivel G5, según la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA), la actual es de G4. Es decir, es muy potente, pero no tanto como peligrosa, al menos de momento.

Si se produjera una tormenta solar del máximo nivel, la tecnología fallaría, provocando un gran apagón a nivel mundial que podría durar meses. Una falla que provocaría que no hubiera electricidad, y por tanto que fuera imposible recibir servicios esenciales como corriente eléctrica e incluso sistemas de agua, control de materiales peligrosos en el sector de la energía, etc. Un cataclismo que no es el que enfrenta la humanidad en este caso, pero que en el peor de los escenarios, es posible.

 

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P. F. Q.

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