La provincia de Cádiz volvía a erigirse como un punto neurálgico del tejido asociativo flamenco, durante el VI Encuentro Provincial de Peñas Flamencas, celebrado en Arcos de la Frontera recientemente. Una jornada cargada de emoción y simbolismo, que sirvió para reivindicar el papel de las peñas flamencas gaditanas y rendir homenaje a medio siglo de historia de la Peña Cultural Flamenca de Arcos, que tuvo como ilustración artística el buen hacer cantaor de Jesús Méndez, Morenito de Illora y Ana Gómez.
El presidente de la Federación Provincial de Peñas Flamencas de Cádiz, Enrique Morales, aperturaba el acto con un mensaje de unidad y orgullo: "Nuestras entidades son el crisol de sinergias de todos los amantes, conocedores, creadores y hasta de los meros espectadores del flamenco".

En este sentido, aseguraba que "las peñas son el lugar donde se respeta, se cuida y se vive el flamenco con autenticidad, además de dar cobertura a los nuevos artistas". Y donde también se acoge con alegría a los más veteranos.
"Este año vamos a solicitar a la Junta que se conceda la Medalla de Andalucía a María Vargas, que hoy se encuentra con nosotros y es artista de artistas con una trayectoria profesional que está a punto de cumplir 50 años", informaba a los casi 400 socios de distintas peñas gaditanas presentes en el encuentro.

Morales recordaba en su discurso los inicios de la actual junta directiva, nacida en 2018 tras el congreso que se realiza en La Línea en torno a la figura de Antonio El Chaqueta y en el que se puso sobre la mesa el presente y futuro de las peñas gaditanas.
Desde entonces, la Federación ha consolidado un trabajo constante con 50 peñas federadas que, con una modesta cuota de 60 euros anuales, reciben retornos que multiplican su aportación — entre 2.500 y 3.250 euros anuales— gracias a la gestión de actividades, subvenciones y recitales que se llevan a cabo por parte de la junta directiva. De hecho, exponía que siete años después de la llegada de este nuevo impulso "la federación realiza con las diferentes peñas dos, incluso tres actividades anualmente".

Un calendario anual que no se detiene
Así las cosas, el presidente presentaba un balance del año 2025 que muestra la magnitud del trabajo realizado. Entre las iniciativas, se encuentra el Circuito Andaluz de Peñas Flamencas, en colaboración con la Junta de Andalucía, que rinde homenaje a Juanito Villar con 33 recitales programados hasta el 29 de noviembre, gracias al acuerdo con el Instituto Andaluz de Flamenco, si bien es con la Diputación de Cádiz con quien más actividades se llevan a cabo.
Según informaba, junto con el ente provincial se desarrolla este año la séptima edición del Aula de Flamenco para Niños y Jóvenes Los Colores del Flamenco, que, a través de teatro, títeres y música, llegará a 21 peñas de la provincia y a más de 2.500 alumnos en los meses de octubre y noviembre. Desde 2019, esta iniciativa ha alcanzado ya a más de 25.000 escolares y 154 centros educativos.
A ello se suma el Día del Flamenco en la provincia, con 17 recitales en diferentes peñas los días 26 y 27 de septiembre. Morales insistió en que esta actividad pretende "convertirse en un referente turístico-cultural, fijando la fecha en el calendario anual de eventos flamencos gaditanos".
No obstante, apuntaba que "el cierre del año será aún más ambicioso", ya que se llevarán a cabo 47 zambombas organizadas en 31 municipios durante el mes de diciembre, lo que convierte a la Federación en un motor inigualable de programación. "Se le dedica mucho trabajo, muchas horas y cerraremos el año con 119 actividades", recalcó Morales, reivindicando el carácter altruista de la gestión.

La memoria de Arcos y sus peñistas
El encuentro en Arcos tuvo también un fuerte componente emotivo con el recuerdo de los orígenes de la Peña Cultural Flamenca local, fundada en 1975. Su primer presidente, Luis Velázquez-Gaztelu, tomó la palabra para repasar aquellos días de ilusión compartida: "Nuestra Peña Flamenca nació como consecuencia del interés por el flamenco de un grupo de arcenses, cuyo nexo era buscar un medio para promocionar en un amplio sentido el flamenco en Arco".
Velázquez-Gaztelu recordó cómo los fundadores, procedentes del Barrio Bajo o San Francisco, se reunieron en la taberna de Joselito el de la viuda para dar forma al proyecto. Posteriormente, la peña se trasladó al Bar La Granja, cuyo trastero, una antigua alfarería, ofrecía un sonido y un ambiente perfecto para el cante. Allí acogieron a figuras como Terremoto de Jerez y Manolo Parrilla, en veladas que se prolongaban hasta el amanecer.
El veterano presidente también rememoró festivales memorables, como el de María La Perrata con sus hijos Juan Peña 'El Lebrijano' y Pedro María Peña, o el homenaje a Manolo Zapata, acompañado de cantaores locales como La Tiguera, Mochuelo o Cantarrana. "Lo realmente extraordinario en esta peña son las sucesivas juntas directivas y los socios que han logrado perpetuar la peña flamenca viva a lo largo de 50 años", afirmaba entre aplausos.

Compromiso institucional y futuro del flamenco
El alcalde de Arcos, Miguel Rodríguez, subrayó el peso del flamenco en la identidad local: "El flamenco es una forma de ser, es una forma de sentir y es una forma de transmitir. Y en Arcos de la Frontera somos flamencos". El regidor anunció la adhesión al reconocimiento a María Vargas y que el Ayuntamiento llevará a pleno la propuesta de conceder la Medalla de Andalucía a María Vargas, además de un reconocimiento especial a la Peña Cultural Flamenca por sus cinco décadas de trayectoria.
Rodríguez aprovechó también para recordar a figuras locales como José María Velázquez-Gaztelu, divulgador esencial a través de Rito y Geografía del Cante, y a Manuel García Barba “Cantarrana”, fallecido recientemente. “Ha sido uno de esos máximos exponentes del flamenco de Arcos”, expresó con emoción.

Por su parte, Concha Prieto Falcón, presidenta de la Confederación Andaluza de Peñas Flamencas y de la Federación de Sevilla, resaltó la vitalidad del movimiento gaditano. "Una peña es esa casa de amigos, esa escuela sin pupitres, pero sobre todo convivencia. Y convivencia es esto de hoy, que estén aquí 400 personas", declaró.
Prieto recalcó que las peñas viven con ilusión pese a la escasez de recursos, y apeló a la unión y al respaldo de las instituciones: "Aquí tenemos la suerte de contar con la Diputación de Cádiz, con gente que sabe que es responsabilidad suya mantener esta cultura única en el mundo".

Morenito de Íllora, durante un momento de su intervención en el Vl Encuentro Provincial de Peñas Flamencas de Cádiz
El cierre institucional corrió a cargo de Manuel Rodríguez de Alonso, director del Área de la Ciudadanía de la Diputación Provincial de Cádiz, quien reafirmó el apoyo provincial: “Las Peñas Flamencas son los guardianes del legado del flamenco y continuaremos apoyándolas con decisión”.
Jesús Méndez, Morenito de Íllora y Ana Gómez, colofón artístico del encuentro
Como es habitual en los encuentros provinciales organizados en ocasiones anteriores por la Federación Provincial de Peñas Flamencas de Cádiz, tres artistas de referencia ocuparían el protagonismo una vez finalizado la parte protocolaria.
En esta ocasión, serían la cantaora local Ana Gómez quien, junto a Morenito de Íllora y Jesús Méndez, por este orden, ofrecerían lo mejor de sus gargantas para el gozo de las casi 400 personas que se daban cita en un encuentro que mostraba, en una nueva ocasión, la fortaleza de la que goza el tejido asociativo jondo de la provincia de Cádiz.



