Una operación conjunta contra la logística del narcotráfico desarrollada en la provincia de Cádiz ha permitido abortar tres intentos de aprovisionamiento de combustible destinados a embarcaciones utilizadas por organizaciones criminales. El dispositivo, llevado a cabo de madrugada el pasado 2 de diciembre, se saldó con la incautación de cuatro embarcaciones de alta velocidad y 481 garrafas de gasolina, que suman más de 14.000 litros de combustible.
La actuación ha sido desarrollada por la Guardia Civil y el Servicio de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria, y se desplegó de forma simultánea en distintos puntos del litoral gaditano: Conil de la Frontera, El Puerto de Santa María y el caño Sancti Petri.
Interceptadas narcolanchas y un camión con material ilícito
Durante el operativo participaron medios marítimos de Vigilancia Aduanera y patrullas territoriales de Seguridad Ciudadana de la Guardia Civil por tierra. En el transcurso del dispositivo, los agentes interceptaron un camión que transportaba en su interior dos embarcaciones, un motor y 127 garrafas de gasolina, material habitualmente empleado para el apoyo logístico a las redes de narcotráfico que operan en el Estrecho.
De forma paralela, los sistemas de vigilancia permitieron detectar varias embarcaciones navegando con petacas de combustible. Los agentes del SIVE (Sistema Integrado de Vigilancia Exterior) de la Guardia Civil localizaron estos movimientos sospechosos y alertaron a las unidades marítimas.
Gracias a esta coordinación, el Servicio de Vigilancia Aduanera logró interceptar dos embarcaciones de alta velocidad y 354 garrafas adicionales de gasolina, evitando que el combustible llegara a su destino final y cortando así una parte esencial de la cadena logística del narcotráfico.
Incendio de una embarcación y actuaciones en curso
Durante el desarrollo del operativo, los servicios de bomberos tuvieron que intervenir para extinguir el incendio de una embarcación recreativa. Las autoridades investigan ahora si esta nave se encontraba cargada de gasolina en el momento del siniestro, lo que podría estar relacionado con la actividad ilícita detectada durante la operación.
Desde la Guardia Civil y la Agencia Tributaria se destaca que este tipo de actuaciones buscan desarticular la infraestructura logística que permite a las organizaciones criminales operar con narcolanchas de gran potencia, cuya actividad supone un grave riesgo para la seguridad y el medio marino.
La operación se enmarca en la estrategia de presión constante sobre las redes de apoyo al narcotráfico, centrada especialmente en el control del combustible, considerado uno de los elementos clave para frenar la operatividad de estas embarcaciones en las costas andaluzas.