Funcionarios de la cárcel de Puerto II celebraron el Sábado de Pasión salvándole la vida a un preso. Los hechos sucedieron un poco antes de las 17.00 horas, mientras la población reclusa permanecía en sus celdas antes de la apertura de la tarde. El interno en cuestión se hallaba en el departamento de aislamiento, en una celda de observación (celdas en las cuales en una de las paredes hay un cristal reforzado que da a la celda adyacente), y el interno que se hallaba en la otra pulsó el botón de alarma al ver cómo aquel preparaba una cuerda confeccionada con cordones de zapatos y la colocaba a modo de soga en la puerta de la celda.
En menos de un minuto, se presentó casi la totalidad de la plantilla que prestaba servicio en el interior del centro, incluidos el jefe y el coordinador de servicios. La asociación Tu Abandono Me Puede Matar (TAMPM) cuenta que era necesaria la presencia de muchos funcionarios, porque en la celda había dos puertas: la de chapa metálica común a todas las celdas, y una segunda de barrotes, llamada en la jerga penitenciaria “cangrejo”, y en la que es fácil anudar una cuerda a modo de soga.
Finalmente se pudo salvar la vida del interno, que fue atendido por los servicios médicos en el acto, y que no sufrió daños de mayor consideración que las lesiones causadas en el cuello. Buena parte de los funcionarios que intervinieron en este acto lo hicieron también el año pasado en un caso absolutamente igual, salvo que el instrumento utilizado por el interno fue una sábana anudada. En aquel otro caso, el peso del interno y el grosor de la sábana dificultaron mucho el rescate, y el interno llegó a perder el conocimiento por asfixia, aunque finalmente su vida fue salvada.
La asociación Tu Abandono Me Puede Matar quiere felicitar a esos "héroes anónimos" que salvaron la vida del preso, "un hecho que no es infrecuente en las prisiones de nuestro país, como tampoco es infrecuente que, al contrario de lo que sucede cuando son otros colectivos los que protagonizan hechos así, queden en el más absoluto olvido".
"Para ellos no habrá actos institucionales, recompensas económicas, comunicados oficiales... Sólo la palmada en el hombro y el afecto de sus compañeros y, como mucho, alguna mención en algunos medios de prensa a la que, de antemano, le agradecemos desde TAMPM su labor para que se conozcan, aunque sólo sea un poco, los gravísimos incidentes que se viven en las cárceles españolas. Y, como en este ingrato y hostil mundo penitenciario es común, no obtendrán ningún otro reconocimiento por esa vida salvada más que los citados, ya que no os la va a decir nadie, lo hacemos nosotros: Gracias, compañeros", recalcan desde TAMPM.


