El temporal marítimo que ha azotado la costa en las últimas horas ha dejado su huella en la playa de El Palmar, uno de los enclaves más concurridos del litoral gaditano. La fuerza del mar ha provocado daños en infraestructuras y equipamientos situados a pie de arena, generando una imagen de destrozos poco habitual en este punto turístico de referencia.
Según ha confirmado el Ayuntamiento de Vejer, el oleaje ha arrancado pasarelas de acceso, desprendido varias boyas de balizamiento e incluso arrastrado papeleras que estaban fijadas en la franja de arena. Un escenario que ha obligado a activar de inmediato un plan de actuación para restaurar la zona y garantizar la seguridad de vecinos y visitantes.
Este episodio se ha producido sin venir asociado de fuerza del viento, sino que es un caso de mar de fondo, de persistencia de oleaje importante. De hecho, el Ayuntamiento ha informado también al mediodía de que rige la bandera roja, por lo que se prohíbe el baño.
Trabajos ya en marcha
Los trabajos de reparación ya están en marcha. Desde el consistorio han señalado que se están reponiendo los elementos dañados y rehabilitando las áreas más afectadas con el objetivo de que la playa recupere “unas condiciones óptimas para el disfrute de todos”. Además, se ha reforzado la presencia de equipos de Protección Civil, personal de limpieza y socorristas, que durante estos días intensifican las labores de vigilancia y control preventivo.
La prioridad, insisten, es la seguridad. Por eso, se recuerda a la ciudadanía la importancia de seguir en todo momento las instrucciones del servicio de salvamento. También se aconseja extremar la precaución al bañarse o practicar deportes acuáticos, ya que persisten fuertes corrientes en distintos puntos del litoral.
Este episodio se suma a los efectos cada vez más visibles que dejan los temporales en las costas andaluzas. El Palmar, conocida por su ambiente surfero y su atractivo turístico, afronta ahora un proceso de recuperación que busca minimizar el impacto del mar y devolver a la playa su aspecto habitual antes de la llegada masiva de visitantes.
