El sector pesquero artesanal del litoral gaditano ha mostrado su satisfacción por la recuperación del atún rojo (Thunnus thynnus) a niveles históricos. Consideran que este repunte confirma la eficacia de las medidas de gestión y conservación aplicadas en los últimos años. A su juicio, se trata no solo de un éxito medioambiental, sino también de una oportunidad para revitalizar las economías locales que dependen de una pesca sostenible.
Pese a esta evolución positiva de la especie, los pescadores artesanales denuncian que el reparto actual de la cuota de atún rojo les excluye de forma sistemática. Señalan que sus flotas cumplen con estrictos criterios de sostenibilidad ambiental, social y económica, por lo que consideran injustificable su marginación del acceso a este recurso clave.
El sector lamenta la pasividad de las administraciones competentes ante lo que califican como una “injusticia histórica”. Denuncian que la falta de alternativas viables de pesca y la imposibilidad de capturar especies rentables como el atún rojo están abocando a la desaparición progresiva de una flota con gran arraigo y trayectoria en la pesca responsable.
Desde hace años, los pescadores artesanales solicitan una redistribución más justa de la cuota de atún rojo. La demanda ha sido reiterada en numerosas ocasiones y dirigida tanto al Gobierno central como a las administraciones autonómicas implicadas en el proceso de asignación de capturas.
A esta situación se añade la pérdida de especies tradicionales en los caladeros del Estrecho de Gibraltar. Los pescadores apuntan como causas al cambio climático, la proliferación del alga asiática Rugulopteryx okamurae, que daña los fondos marinos, y la presencia constante de una colonia de atún rojo que altera el equilibrio de los ecosistemas locales y afecta negativamente a otras capturas.
El impacto sobre el sector ha sido severo. En el año 2015, el puerto de Conil contaba con más de 80 embarcaciones artesanales. En la actualidad, apenas permanecen activas unas 40, lo que supone una reducción del 50% en solo una década.
Uno de los repartos "más desiguales e injustos"
Raúl García, coordinador de Pesquerías de WWF España, ha criticado el actual sistema de reparto. “Mientras en puertos como el de Tarifa hay embarcaciones artesanales con apenas 1,5 toneladas de cuota de atún rojo y sin alternativas reales de pesca, grandes empresas concentran más de 3.700 toneladas destinadas al engorde”, ha señalado. A su juicio, se trata de “uno de los repartos más desiguales e injustos”, por lo que reclama una revisión urgente del sistema mediante un nuevo decreto que garantice la equidad y la sostenibilidad.
En la misma línea se ha expresado Nicolás Fernández, gerente de la Organización de Productores Pesqueros Artesanales Lonja de Conil (OPP72). Fernández ha recordado que el Gobierno de España debe garantizar un reparto justo en virtud de la Ley 5/2023, de 17 de marzo, de Pesca Sostenible e Investigación. También ha lamentado la falta de posicionamiento claro por parte de la Junta de Andalucía ante las reivindicaciones del sector.
Los representantes de la pesca artesanal instan a las administraciones públicas a corregir este desequilibrio. Consideran imprescindible un acceso justo a los recursos pesqueros para asegurar la viabilidad de sus embarcaciones, preservar el modelo de pesca sostenible y mantener el empleo vinculado a las comunidades costeras.