La Guardia Civil ha desmantelado en Chipiona una plantación con más de 3.000 plantas de marihuana y ha detenido a la pareja que supuestamente había instalado dicho cultivo en un chalet alquilado. Según ha informado la Guardia Civil en un comunicado, se ha detenido a un hombre y una mujer como presuntos autores de un delito contra la salud pública y otro de defraudación de fluido eléctrico, y se han intervenido 3.157 plantas de marihuana, así como todo el complejo sistema que se había montado para favorecer y acelerar su crecimiento.
La pareja había instalado todo un complejo sistema eléctrico, que incluía multitud de diferenciales, todo un laberinto de iluminación, extractores y humidificadores. La electricidad que alimentaba todo el sistema se extraía de forma ilegal del alumbrado público.
La operación se llevó a cabo el 20 de abril en la localidad de Chipiona cuando, gracias a las investigaciones realizadas e indicios encontrados, los guardias civiles localizaron un domicilio donde se habría instalado un cultivo ilegal de cannabis.
Una vez realizada la solicitud de entrada y registro, se verificó la existencia del cultivo indoor, que incluía lámparas de gran potencia con sus acumuladores de corriente, ventiladores de pared, equipos de aire acondicionado, potentes filtros de carbono para enmascarar el olor característico de estos cultivos y extractores de aire.
Además, sus responsables habían tomado numerosas medidas para impedir cualquier observación desde el exterior, tanto del cultivo como del "enganche" ilegal desde el tendido eléctrico hacia la vivienda.
Tras identificar a los responsables de la plantación, se procedió a su detención como presuntos autores de los delitos de tráfico de drogas y defraudación de fluido eléctrico.
Cabe recordar además que este martes la Guardia Civil intervino en varias operaciones diferentes, en Algeciras, Zahara de los Atunes y Sanlúcar de Barrameda, en las que lograron incautar más de 4.000 kilos de hachís y detuvieron a un total de trece personas.
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