La Guardia Civil ha detenido en Chiclana a una mujer que transportaba casi dos mil litros de gasolina en garrafas para suministrar al narcotráfico.
Es lo que se conoce coloquialmente como 'petaqueo', transportar gasolina en petacas o bidones de gasolina con objeto de poder dar suministro a las narcolanchas que esperan en el mar su oportunidad para meter el hachís en Cádiz.
Este miércoles, agentes del Puesto Principal de Chiclana de la Frontera interceptaron una furgoneta cargada de bidones de gasolina.
El suceso ha ocurrido en un camino rural del municipio tras una vigilancia de los agentes, quienes dieron el alto a una furgoneta de grandes dimensiones.
Cuando comprobaron la documentación, vieron que era robada y que en la parte de atrás tenía una gran cantidad de bidones de gasolina, al menos 97, lo que se estima como 1.900 litros de gasolina.
La mujer que conducía el furgón fue detenida, y los agentes ahora investigan si el combustible era para suministrar a las narcolanchas, tal y como se presupone.
La Guardia Civil explica que las 'petacas' habitualmente favorecen al narcotráfico ya que pertenecen a la red logística que avitualla a estas narcolanchas, normalmente a una veintena de millas de la costa. Así, lanchas más pequeñas cargadas de combustible acuden al rescate de las otras, con objeto de poder surtir el cargamento y continuar su funcionamiento.


