Tras catorce años al frente del Ayuntamiento de Algeciras, José Ignacio Landaluce se prepara para abandonar la Alcaldía de forma inminente. El todavía regidor tiene previsto presentar su dimisión en las próximas horas tras las denuncias por acoso sexual que ha provocado la retirada del respaldo político del Partido Popular y ha situado a la formación en una posición delicada. La situación se ha agravado después de conocerse unos audios en los que se refleja un intento de acallar las denuncias, lo que ha precipitado la decisión del partido de forzar su salida.
La dirección autonómica del PP, encabezada por Juanma Moreno, ya tramita su baja como militante y del Grupo Popular municipal, al tiempo que diseña un relevo ordenado en la Alcaldía para evitar una moción de censura que comprometa la estabilidad institucional. El acta de concejal que dejará Landaluce será ocupada por Mercedes Barea de Castro, actual asesora del PP en el Ayuntamiento. Además, no se descarta que la salida del alcalde venga acompañada por la de Juana Cid, delegada de Fiestas y figura estrechamente vinculada al todavía alcalde tanto en el plano político como personal.
Relevo y presiones políticas
La dimisión de Landaluce no solo implicará una reconfiguración del gobierno municipal, sino también cambios profundos en el PP local. El partido, que hasta ahora presidía el propio alcalde, quedará bajo la tutela de una gestora encargada de pilotar esta etapa de transición. En el ámbito institucional, el encargado de asumir la Alcaldía será Jacinto Muñoz, actual primer teniente de alcalde, responsable de Seguridad Ciudadana y vicepresidente de la Diputación de Cádiz, a quien el partido ha señalado como relevo para garantizar continuidad en la gestión.
En paralelo, el Grupo Municipal del PSOE de Algeciras ha solicitado aclaraciones sobre “en calidad de qué” votará Landaluce en el pleno ordinario previsto para este viernes, el último del año. Los socialistas consideran imprescindible determinar su situación jurídica y política tras la ruptura con el Partido Popular.
Para ello, han registrado un escrito dirigido a la Secretaría General del Ayuntamiento solicitando que se requiera al portavoz municipal del PP y a la Secretaría General del partido a nivel nacional una certificación que acredite su baja como afiliado. Una vez confirmada, reclaman que se le declare concejal no adscrito y que se informe de ello al Pleno en la primera sesión que se celebre.
A la presión política se ha sumado el diputado de Se Acabó la Fiesta, Alvise Pérez, quien ha advertido en redes sociales de que, si Landaluce no dimite, hará públicas unas supuestas pruebas en forma de mensajes privados. Según ha señalado, se trataría de capturas de WhatsApp de varias mujeres presuntamente implicadas en las denuncias de acoso sexual. Además, ha manifestado su intención de llevar el caso a la vía judicial, con independencia de la decisión que adopte el todavía alcalde de Algeciras.




