La Consejería de Sanidad, Presidencia y Emergencias ha confirmado la detección de un caso de fiebre del Nilo Occidental en un ave en La Línea de la Concepción. La información fue incluida este miércoles en el registro de enfermedades de declaración obligatoria del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
La Junta de Andalucía ha señalado que se están evaluando la distancia entre el lugar donde fue encontrado el animal y el núcleo de población más cercano, con el objetivo de determinar el nivel de vigilancia que debe establecerse en el municipio. Se trata del tercer ave diagnosticada con esta enfermedad en Andalucía durante el presente año, según han precisado las autoridades sanitarias.
Aumento de vigilancia en invierno
El consejero de Sanidad, Presidencia y Emergencias ha alertado recientemente sobre el aumento de casos positivos detectados durante las últimas semanas de octubre y ha insistido en la importancia de que tanto las administraciones como la ciudadanía mantengan las medidas de protección y prevención. Ha subrayado que cada actuación local repercute directamente en la protección de toda la comunidad, reforzando la necesidad de mantener la vigilancia ante la circulación de mosquitos, favorecida por las altas temperaturas recientes.
En este marco, la Consejería continuará operando una red de trampas centinelas durante todo el otoño e invierno para garantizar la vigilancia entomológica. El dispositivo de control se mantiene operativo en toda la región, y la administración ha destacado la colaboración de la ciudadanía y de las distintas administraciones locales, que ha calificado como ejemplar en términos de concienciación y cooperación. La coordinación con ayuntamientos y diputaciones se ha fortalecido, lo que ha permitido lograr un balance positivo en la actualización del Programa de Vigilancia y Control de Vectores para 2025.
El programa, que cuenta con una inversión de 1,2 millones de euros, incorpora mejoras en el modelo predictivo y simplifica los niveles de riesgo en tres categorías: alto, medio y bajo, incluyendo a todos los municipios andaluces. Su operatividad se extiende a lo largo de todo el año y de toda la región, con un notable incremento en el número de trampas, que pasa de 27 en 2024 a 201 en 2025, consolidando así un sistema de vigilancia más amplio y continuo.


