El barrio de Río San Pedro, en Puerto Real, ha vuelto a demostrar que la solidaridad también se escribe en mayúsculas cuando más falta hace. A pocas semanas de la Navidad, los vecinos y vecinas de la zona han impulsado una emotiva iniciativa para acompañar y dar ánimo a las familias afectadas por el incendio del Edificio Miramar, ocurrido el pasado 20 de noviembre. La propuesta nace en el grupo de Facebook Río San Pedro, un lugar maravilloso y lleva por nombre Bufanda Solidaria con el Edificio Miramar.
La idea es sencilla, pero cargada de simbolismo: dejar mensajes de apoyo, cariño y buenos deseos dirigidos exclusivamente a las personas afectadas por el incendio. Un gesto colectivo que busca arropar, aunque sea de forma virtual, a quienes atraviesan una situación especialmente dura en estas fechas tan señaladas. Tal y como se explica en el mensaje difundido en redes sociales, la Navidad es “una época mágica que nos transporta a todos a la niñez, nos hace sonreír más de lo normal y nos vuelve a demostrar que la magia existe y tiene muchas formas de presentarse en la vida”. Sin embargo, para 124 familias, estas fiestas serán muy distintas.
El texto recuerda que, aunque pondrán “lo mejor de ellos para que los suyos disfruten”, no dejará de ser “una Navidad triste”. El motivo es el incendio que se declaró de madrugada, alrededor de las 02.50 horas, en el garaje comunitario de la calle Uruguay, en el Edificio Miramar. El fuego afectó prácticamente a todo el aparcamiento subterráneo, donde se encontraban unos 30 vehículos y varias motocicletas, y provocó una amplia movilización de los bomberos de la provincia de Cádiz.
Un día para olvidar
Aunque el suceso solo afectó a lo material, el impacto emocional ha sido profundo. La instalación del saneamiento general resultó dañada, lo que tuvo consecuencias directas en la habitabilidad de varias viviendas. Como consecuencia, tres pisos situados en los bajos del edificio fueron precintados tras la aparición de grietas. Tres semanas después del incendio, se ha procedido a la retirada de los últimos vehículos siniestrados del garaje.
A día de hoy, los vecinos continúan sin red de saneamiento ni suministro de agua potable, una situación que se prolonga en el tiempo y que dificulta enormemente su día a día.
Por todo ello, desde el grupo vecinal se hace un llamamiento claro. “Os pedimos regalarles buenos comentarios de ánimo, de compañía, de cariño… para que sepan que no están sol@s, que no les olvidamos y que deseamos que todo pase pronto”. La iniciativa se cierra con un mensaje directo y cargado de humanidad. “Desde aquí os mandamos un abrazo virtual lleno de cariño”. Un gesto colectivo que, en plena Navidad, busca devolver un poco de luz a quienes lo perdieron todo en una sola noche.



