Es la batalla a través de la que se explica la conquista musulmana de la Península Ibérica. Los visigodos sufrían una guerra civil de familias y facciones por el trono y los musulmanes, como religión nacida poco antes, no paraba de expandirse desde Arabia hacia el Norte de África y el Magreb. Así, la expansión hacia la Hispania visigoda fue un crecimiento natural para el Califato Omeya.
Históricamente, es la Batalla del Guadalete, en la que murió el rey Rodrigo. Tras este enfrentamiento, la expansión musulmana sería relativamente rápida hasta encontrar resistencia entre algunos grupos armados. De ellos, el más conocido es el de Don Pelayo, en Asturias, considerado para la historiografía española un héroe.
De lo sucedido en el Guadalete hay toda una leyenda que sitúa en el entorno, por ejemplo, la construcción del Monasterio de La Cartuja. Una batalla sucedida entre los términos municipales de Jerez y El Puerto, quizás más cerca de Doña Blanca que del propio monasterio. O eso se pensaba hasta ahora.
Hasta ahora, se había interpretado que la batalla de 711 que cambió por siglos la Península habría tenido lugar en Wadi Lakko, nombre que correspondería con el Guadalete. Según informa El País citando un artículo en la revista Atenea, firmado por expertos en historia militar, del CSIC o de la propia Junta de Andalucía, se ha tratado de una confusión y que no cuadra con otros datos de los cronistas de la época. Ese río mencionado no sería el Guadalete.
En esas crónicas es clave las Montañas Transductinas. Estas se ubicarían en el actual término municipal de Algeciras. Desde ahí avistaron las tropas musulmanas al ejército de Rodrigo, que llegó desde la ciudad de Córdoba. El punto de encuentro y, por tanto, de la batalla, sería, más allá de las colinas que rodean la Bahía de Algeciras.
Y según la reconstrucción de la batalla realizada en el artículo de los historiadores, el hecho de que en la retirada de Rodrigo viera su paso cortado por charcas y lagunas sitúan estas en la laguna de La Janda, actualmente desecada.
En concreto, por las citadas recreaciones del enfrentamiento, los hechos habrían ocurrido en la confluencia del arroyo del Vico y el río Almodóvar, en el término municipal de Tarifa, entre Facinas y Tahivilla.
En esta confusión habrían tenido un papel importante los cronistas cristianos, clave en la obra de Claudio Sánchez Albornoz, toda una institución en el estudio de la Historia de España. Y, como menciona El País, sí existe la leyenda histórica en Facinas de que allí se enterró al rey Rodrigo tras caer en la batalla. Una leyenda que hasta ahora no era tan tenida en cuenta.
De continuar las investigaciones por esta línea y aceptarse como principal hipótesis sobre la batalla, es lógico pensar que habría que dejar de llabar 'Batalla del Guadalete' a este evento histórico. Quizás, por Batalla del Vico, o Batalla de Facinas. Y curiosamente, situaría la conquista musulmana muy cerca, a apenas 40 kilómetros, del Faro de Trafalgar, que vivió otra gran batalla de la historia de España. Si bien es sabida la gran historia del Estrecho de Gibraltar, en este punto concreto entre los términos municipales de Tarifa y Barbate, directamente, se han dado dos grandes eventos de la historia que explica lo que hoy es España.
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