El fenómeno Funko ha vuelto a protagonizar la segunda jornada de la San Diego Comic-Con Málaga, con cientos de asistentes que se agolparon desde la apertura de puertas para intentar conseguir una de las 150 figuras exclusivas puestas a la venta cada día.
Las colas se han extendido desde el estand de Funko y han dado la vuelta a gran parte de la zona expositora, replicando la escena del día anterior, aunque con un incremento en la afluencia debido a los problemas registrados en la primera jornada, que se difundieron rápidamente a través de redes sociales.
Los modelos exclusivos del evento
El interés se centra en cuatro modelos de figuras exclusivas, de los que existen únicamente 9.000 ejemplares a nivel mundial. Cada jornada se ponen a la venta 150 unidades, y se limita la compra a una figura por persona.
Los modelos disponibles incluyen a Cody Rhodes, Spider-Boy, General Grievous y Tim Murphy. Su precio oficial es de 22 euros, aunque en el mercado de reventa los ejemplares han superado los 200 euros.
Los Funkos cuentan con la etiqueta de edición limitada de la San Diego Comic-Con Málaga, lo que los ha convertido en un objeto de deseo para coleccionistas y aficionados. La elevada demanda ha generado situaciones de saturación en la zona de venta, que se han visto acompañadas de quejas de los compradores.
El día anterior, alrededor de cuarenta personas registraron reclamaciones tras esperar varias horas la reposición de figuras sin éxito. Para evitar problemas similares, la organización decidió poner a la venta las unidades disponibles desde primera hora, consolidando así estas figuras coleccionables como el principal atractivo de la zona expositora de la Comic-Con, aunque también como la principal fuente de conflictos.






