El Ayuntamiento de Jerez ha activado un nuevo procedimiento de venta forzosa, esta vez dirigido a la finca situada en la calle Fernán Caballero 13, incorporada al Registro Municipal de Solares y Edificaciones Ruinosas. La junta de gobierno local ha aprobado tanto el inicio del proceso como el Pliego de Condiciones que regulará la adjudicación de este inmueble, cuyo precio de salida se fija en 28.241,93 euros.
La parcela, con una superficie de 244 metros cuadrados, estaba destinada inicialmente a la construcción de un edificio de cinco viviendas, pero las obras quedaron paralizadas y abandonadas, conservándose únicamente la estructura. Desde entonces, el espacio ha sufrido reiterados actos de vandalismo, incluso episodios de incendios, lo que obligó al Ayuntamiento a intervenir de forma subsidiaria para tapiar la finca y evitar accesos no autorizados.
Noveno procedimiento de venta forzosa del mandato
La delegada de Vivienda, Belén de la Cuadra, ha recordado que este es el noveno expediente de venta forzosa tramitado en el actual mandato. Además, ha explicado que en esta ocasión se han introducido nuevos criterios de valoración para favorecer el interés social y el aprovechamiento urbanístico del solar.
Entre los criterios, está destinar la futura edificación a uso residencial, construir un mayor número de viviendas, de al menos dos dormitorios, y orientar el proyecto a vivienda protegida (VPO). Ninguno de estos criterios es excluyente, lo que permite combinar varios compromisos en la oferta.
El pliego de Condiciones establece los siguientes criterios de adjudicación: mejor oferta económica: hasta 60 puntos, para la propuesta más alta; destino residencial: hasta 15 puntos, para quienes se comprometan a usar el inmueble con fines residenciales; mayor número de viviendas: hasta 15 puntos, para proyectos con más unidades de al menos dos dormitorios; y vivienda protegida (VPO): hasta 10 puntos, si se destina la promoción a vivienda protegida.
El Ayuntamiento busca así recuperar un inmueble degradado, dar respuesta a la demanda de vivienda y promover un uso responsable del suelo urbano, transformando espacios abandonados en proyectos habitables, accesibles y de interés social.


