A primera hora de la mañana de este domingo se ha producido una imagen que hacía mucho tiempo que no se veía. En este 2020, en el que no hubo Semana Santa en las calles por la crisis sanitaria del coronavirus, los más devotos han recuperado la procesión del Rosario de la Aurora.
Esta fecha coincide con el Domund 2020, una cita que busca mantener el espíritu misionero entre los católicos, día en que se realizan donaciones económicas a la Iglesia para estas actividades en terceros países.
La procesión del Rosario de la Aurora en Jerez ha partido de la iglesia de Santa Ana, desde donde ha continuado hacia el centro de la ciudad. Los portadores de la imagen, que no tenían que hacerlo desde debajo sino alrededor del paso, han ido con mascarilla. La organización ha tratado de mantener una estricta distancia entre las personas que acudían. El número de asistentes a la procesión ha sido menor respecto a otras ocasiones, toda vez que se trata de una cita muy madrugadora también.
En partes del recorrido se han instalado sillas para mantener la distancia. En las calles, eso sí, han podido verse algunas imágenes de un mayor número de personas, aunque desde el mundo cofrade hay una buena sensación respecto a esta primera procesión.
Este recorrido ha sido aprobado por el Ayuntamiento de Jerez, y se trata de uno de los primeros en Andalucía. En Córdoba, también este domingo, se ha producido otra procesión, pero en otras ciudades como Sevilla, la crisis del coronavirus ha provocado que exista cierto temor a las aglomeraciones.
Asimismo, estas salidas procesionales pueden servir como precedente ante la futura Semana Santa de 2021, que aún está en el aire. Si bien otras celebraciones ya han sido canceladas, como las cabalgatas de Reyes, aún hay que tomar una decisión sobre la Semana de Pasión, algo que corresponde, primero, a las autoridades eclesiásticas, y en segundo lugar, a los gobiernos de las distintas administraciones. Por el momento, los relativamente bajos números de contagios en Andalucía abren la puerta a pensar en que una Semana Santa de 2021 es posible, aunque muy probablemente de forma diferente en todo caso a las que se recuerdan previas al coronavirus.
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