En la plaza Belén de Jerez, están a punto de concluir las obras que dotarán de sombra a este espacio del centro histórico de la ciudad, que se está sometiendo a trabajos de ajardinamiento y plantación de arbolado.
La alcaldesa, María José García-Pelayo, ha visitado este viernes las actuaciones que se están llevando a cabo en la plaza Belén y su entorno, donde también se están ejecutando las obras de reordenación de las calles Barranco y Dr. Lillo, que están prácticamente terminadas.
En su visita, la alcaldesa ha estado acompañada por el primer teniente de alcaldesa, Agustín Muñoz, el teniente de alcaldesa de Servicios Públicos, Jaime Espinar, la delegada de Participación Ciudadana, Carmen Pina, técnicos de la Delegación de Urbanismo y de la dirección de servicio de Centro Histórico, y responsables de las empresas que ejecutan ambas actuaciones, así como representantes de distintas Federaciones de Asociaciones de Vecinos y colectivos del centro de la ciudad.
María José García-Pelayo ha recordado el antes y el después de la Plaza Belén, haciendo referencia a la inversión “que quedó enterrada” del fallido proyecto de la Ciudad del Flamenco, y de la falta de actuaciones de regeneración por parte del anterior gobierno. “Cuando volvimos, la plaza estaba igual que la dejamos y tomamos la decisión de que había que regenerar el centro histórico, y eso pasaba por eliminar espacios abandonados y degradados como este”.
Este proyecto de sombreado supone “la culminación de una tarea a medio hacer”, para lo cual, accedimos a unos fondos de la Junta de Andalucía destinados a mejorar la sostenibilidad y la calidad turística, financiados con fondos Next Generation, por importe de 145.000 euros. La empresa que está ejecutando estos trabajos es Iter Trivium S.L.U.
Durante su visita la alcaldesa ha destacado el nuevo aspecto que luce este céntrico enclave, más acorde con el modelo de ciudad que el Gobierno local está impulsando en Jerez para mejorar la calidad de vida de las personas, promover la sostenibilidad y contrarrestar el cambio climático. “El problema que tenía este espacio es que era un desierto, y con este proyecto haremos que la plaza sea un espacio más bonito, habitable y vivible”, ha señalado.
El proyecto, tal y como ha explicado, ha tenido como objeto dotar a esta plaza de los elementos vegetales, pérgolas y sistemas de control térmico ambiental necesarios para generar espacios de sombras que atenúen la incidencia de la radiación solar directa en las personas, pavimentos y mobiliario urbano, y mitiguen los efectos de las altas temperaturas, principalmente en los meses de verano. “Queda sembrar la plantación en los distintos parterres, pero hemos esperado a que pasaran las Navidades para poder trabajar con más comodidad”. Igualmente, ha anunciado que se prevé también el adecentamiento del suelo de caucho del parque infantil.
Reurbanización de las calles Barranco y Dr Lillo
Continuando por su repaso a las intervenciones que se están ejecutando en este entorno, la alcaldesa ha visitado las obras de reordenación y reurbanización de la calle Barranco y de Dr. Lillo, que han sido financiadas por la Diputación Provincial de Cádiz por importe de 546.036,45 euros.
El objetivo del proyecto es el de intervenir en los accesos y comunicaciones entre dos zonas de gran interés, por un lado, el entorno monumental que conforman la Catedral de Jerez, declarada Bien de Interés Cultural, y otros inmuebles declarados BIC como el Palacio Bertemati; y por otro, el Jerez de Intramuros y sus barrios más señeros, así como el Museo de Lola Flores y el futuro Museo del Flamenco de Andalucía.
A través de estas obras se está procediendo a la creación de un nuevo diseño de todo el viario, que se encontraba muy deteriorado, dando una solución de plataforma única que facilite la eliminación de barreras arquitectónicas, la accesibilidad (el estado actual de esta calle dificultaba el tránsito a personas con movilidad reducida) y la ordenación del tráfico y del aparcamiento con unas cualidades de pavimentos homogéneas.
El proyecto de la calle Barranco contempla un espacio de recepción de visitantes y de entrada al edificio del Museo del Flamenco. Igualmente, el proyecto contempla la sustitución del pavimento en calle Dr. Lillo, ante la fachada posterior del edificio del Museo y principal del edificio del Auditorio, así como la reurbanización de parte del espacio libre de Plaza Belén comprendido entre las calles Dr. Lillo y Rompechapines; este espacio se convertirá en una terraza de recepción de visitantes para dar entrada a la cafetería del Museo del Flamenco y al edificio del Auditorio.