El pasado año abrió sus puertas la cafetería Oasis, un establecimiento situado en la planta baja del centro comercial Los Cisnes que, tras cerca de un año de andadura, ha tenido la iniciativa de poner en marcha un parque infantil junto a la cafetería. Este viernes se inauguró con todas las expectativas de que tendrá una gran aceptación.
Así lo espera Patricia Estévez que junto a su hermana y su madre emprendieron la aventura empresarial tras decidirse por los Cines como lugar donde establecerse tras unos años en la Alameda del Banco. “Teníamos la idea de fomentar la merienda por lo que se nos ocurrió instalar este espacio para los niños”.
Ciertamente, en el centro de la ciudad, escasean las zonas de esparcimiento y juego para los más pequeños. Exceptuando el que existe en la plaza del Progreso, “no hay nada para ellos aquí”. Esta circunstancia les animó a dar el paso adelante en un local frente a la cafetería, lo que da la opción a que los padres puedan tomar un café mientras sus hijos juegan en un lugar cerrado, vigilado, “y donde no hay tráfico por el que haya que estar atento a por dónde se mueven los niños”, subraya Patricia.
También esperan poder ofrecer un servicio a los que van al centro de compras: “Ahora tienen un lugar donde dejarlos pasándoselo bien mientras tanto”. Patricia no oculta que al mismo tiempo se une la intención de que una instalación de este tipo, “animará mucho el centro comercial”.
Una piscina de bolas, zona de lectura, espacio para talleres, juegos infantiles… son las propuestas que encontrarán sus pequeños clientes en este lugar donde también se pueden celebrar cumpleaños. Por lo pronto, la inauguración contó con una gran animación con decenas de niños y niñas ocupando el local donde se instaló una fuente de chocolate, se organizó una gymkhana, pintacaras y películas infantiles.
“Tenemos la esperanza de que funcione ya que después de mucho pensarlo hemos tirado para delante”, señala Patricia Estévez quien, además, cuenta que la idea ya se la venían sugiriendo “muchos de nuestros clientes y la gente que pasa por aquí”. La primera hora cuesta cuatro euros y cada hora añadida uno más.
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