El Hospital Universitario de Jerez despide con gratitud y emoción al Dr. Manuel Ramos Díaz, nefrólogo y director de la UGC de Nefrología, que se jubila tras una extensa carrera marcada por la excelencia clínica, la docencia y la gestión sanitaria. Su salida deja un vacío difícil de llenar, pero también un legado que será recordado por pacientes, compañeros y colegas de profesión.
El Área de Gestión Sanitaria Jerez, Costa Noroeste y Sierra de Cádiz ha querido rendirle un homenaje público, subrayando el impacto de su trabajo no solo en la atención médica, sino también en la formación de nuevas generaciones de especialistas y en la dirección de uno de los servicios clave del hospital.
La trayectoria de Ramos comenzó en la Universidad de Granada, donde cursó la licenciatura en Medicina entre 1974 y 1980. Posteriormente, se especializó en nefrología durante su residencia MIR en el Hospital Universitario Virgen del Rocío de Sevilla entre 1982 y 1986. Desde 1987 ha desarrollado su labor en el Hospital de Jerez, combinando su faceta asistencial con cargos de responsabilidad como Jefe de Estudios, Director Médico y Director de la UGC de Nefrología.
A lo largo de los años, el doctor se ha consolidado como un referente sanitario, no solo por su capacidad profesional, sino también por su compromiso humano. Pacientes y compañeros destacan su cercanía y la huella imborrable que deja en la institución, donde ha impulsado mejoras en la calidad asistencial y fomentado el trabajo en equipo.
Reconocimiento a su trabajo en la sanidad pública andaluza
La directora gerente del Área, Lourdes García, ha dirigido unas palabras cargadas de afecto a este profesional. “Hoy nos despedimos de un referente en nuestra Área, un profesional que ha dedicado su vida a cuidar y apoyar a nuestros pacientes con dedicación y pasión. Su humanidad y orientación a las necesidades de los demás han sido un ejemplo para todos nosotros”, ha expresado.
El reconocimiento no quedó ahí. Con un mensaje personal y cercano, García añadió: “Manolo, permíteme hoy y públicamente dirigirme a ti así, queremos agradecerte tu compromiso y dedicación a lo largo de todos estos años. Ha sido un placer trabajar junto a ti y aprender de tu experiencia y sabiduría. Tu legado permanecerá en nuestro centro, y tu influencia en la vida de nuestros pacientes, colegas y compañeros será recordada siempre. Gracias por ser un ejemplo constante de profesionalidad y humanidad”.
El homenaje reflejó el profundo agradecimiento hacia quien ha sabido conjugar la medicina con la gestión, convirtiéndose en un pilar del hospital durante más de tres décadas. La emoción fue compartida por todo el equipo, consciente de la huella que deja un profesional de su talla.
Ahora, el Dr. Manuel Ramos inicia una nueva etapa vital, la de su merecida jubilación. El hospital y sus compañeros le desean lo mejor en este camino, confiando en que disfrute plenamente del tiempo que llega, después de tantos años de servicio ininterrumpido, a la sanidad pública andaluza. Su marcha deja un vacío, pero también la inspiración de un legado que invita a seguir trabajando con la misma pasión y compromiso que él demostró a lo largo de su carrera.


