"Estamos desesperados, es un sinvergüenza". Son las palabras de una de las personas que ha sido engañada por un matrimonio cuando se disponía a alquilar su piso en Jerez. Más de una decena de vecinos han sido estafados por una pareja con iniciales FJFC y MM que comparten el inmueble en el que residen en páginas de Facebook y Milanuncios.
Los presuntos estafadores ofrecen dos habitaciones con luz y agua incluidos por 400 euros mensuales. Su modus operandi es siempre el mismo. Enseñan el piso a las personas interesadas e incluso firma un contrato de alquiler. "Cuando visitas la vivienda dicen que se mudan porque acaban de tener su tercer hijo y se han comprado una casa en Rota, juegan con los tiempos de traslado, y cuando se va acercando la fecha de ocupación, empieza a realizar amenazas", cuenta una de las afectadas a lavozdelsur.es.
La jerezana, madre de tres hijos, se ha quedado en la calle al descubrir que había sido engañada. "Empeñé el oro que me regaló mi padre de pequeña para que cuando él muriera yo me acordara de él, para poder pagar esos 400 euros; con toda la pena de mi corazón lo vendí", sostiene la mujer, que tomó esta decisión cuando el presunto estafador le comunicó que "el primero que le diese el dinero se quedaba con el piso".
Su esfuerzo fue en vano ya que el matrimonio se ha salido con la suya. "Me he tenido que ir a vivir a casa de mi madre, con 87 años. Ella cobra una pensión baja y somos cuatro para comer. Otra chica ha tenido que estar unos días viviendo en un hotel hasta que ha encontrado otro alquiler", denuncia.
Tras dar a conocer su caso, otras personas se han puesto en contacto con ella y, juntas, han presentado la correspondiente denuncia ante la Policía. "Mucha gente afectada no está denunciado porque no tienen papeles y tienen miedo de ir a la comisaría", dice la jerezana, que añade que este matrimonio ya ha engañado a una señora de 68 años y a una madre con un hijo con discapacidad. "No se cómo no se le cae la cara de vergüenza".
Ella y otras personas, en su mayoría migrantes, se han quedado sin su dinero, la entrada de 400 euros que les pedía, y sin un hogar donde poder seguir adelante.
"Creemos que el dinero no se va a recuperar, nuestro objetivo es que se haga justicia y que Jerez entero se entere de esta estafa para que nadie más caiga. Viven de eso. Queremos que no sigan engañando a gente", señala la jerezana, que habla en nombre de todos los vecinos perjudicados.
Según explica tras haber acudido a la Comisaría, el hombre tiene antecedentes y "el juicio va a ser por lo penal". Al grupo de víctimas les preocupa que esta pareja continue con esta actividad. "Hemos comprobado que siguen ofreciendo lo mismo, siguen igual", añade con la esperanza de poder detener los engaños que han sufrido en sus carnes.
A menudo, las personas migrantes, ya no solo se enfrentan a posibles estafas sino que tienen dificultades a la hora de buscar una casa en su ciudad de residencia por sufrir racismo por parte de algunos caseros. “En cuanto detectan el acento extranjero, de pronto le dicen que el piso ya está alquilado”, señalaba Yolanda Rosado, periodista y responsable de comunicación en CEAin, organización que trabaja por la inserción social del colectivo migrante.
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