La tragedia ha golpeado con fuerza a Valencia y, en especial, al Paseo de Neptuno. Cuatro miembros de una misma familia valenciana —un adulto y tres menores— continúan desaparecidos en Indonesia, con “pocas probabilidades de hallarlos con vida”, según ha explicado Enrique Ortuño, abuelo y suegro de los afectados, tras el naufragio de una embarcación ocurrido en aguas del sudeste asiático, cuya búsqueda se ha suspendido. Ortuño es conocido por ser propietario de un conocido restaurante de playa.
"Mi hija y mi nieta salieron despedidas del barco porque se encontraban en una parte más alta. Cayeron al mar y han sido rescatadas, pero mis tres nietos y mi yerno posiblemente quedaron atrapados en el barco, que se partió y se hundió rápidamente".
Fernando Martín Carreras era entrenador del Valencia CF Femenino B, y durante la pasada temporada había formado parte del cuerpo técnico del primer equipo femenino del club. Además, era yerno del propietario del restaurante El Coso del Mar, uno de los establecimientos más conocidos del Paseo de Neptuno de València. Su fallecimiento, junto al de tres de sus hijos —de 12, 10 y 9 años— ha provocado una profunda conmoción.
La madre, Andrea, y la hija más pequeña que viajaba con ellos sí pudieron ser rescatadas con vida. Ambas se encontraban en una zona más alta del barco y, en el momento del naufragio, salieron despedidas al mar, lo que permitió su posterior rescate. El padre y los otros tres menores, según el relato familiar, quedaron atrapados en los camarotes cuando la embarcación se partió y se hundió rápidamente.
La familia se encontraba realizando su primer gran viaje juntos, una escapada con motivo de las vacaciones navideñas. Las autoridades indonesias han confirmado a los familiares en España el rescate de la madre y de una de las hijas, mientras que el marido y los otros tres hijos han sido dados por muertos, si bien los cuerpos todavía no han sido recuperados.
Fuentes diplomáticas han indicado a Levante que las labores de búsqueda podrían prolongarse entre tres y cuatro días. En ese tiempo, los equipos de rescate intentan localizar a los desaparecidos en una zona especialmente complicada por las corrientes y el estado del mar.
Un naufragio en una zona turística
El barco transportaba a once personas cuando se hundió durante la noche cerca de la isla de Padar, en las proximidades del destino turístico de Labuan Bajo, al este de Bali, en Indonesia. El dispositivo de emergencia logró rescatar a siete personas, entre ellas Andrea Ortuño y su hija, además de cuatro tripulantes y un guía turístico.
Desde el Ministerio de Exteriores se ha informado de que se mantiene un contacto constante con las autoridades indonesias y que el consulado en Yakarta se ha activado para prestar atención a las dos supervivientes valencianas, que se encuentran “fuera de peligro”. Asimismo, se ha desplazado personal diplomático a Labuan Bajo para coordinar la asistencia y el contacto con las familias-
Las autoridades portuarias han atribuido el naufragio a condiciones marítimas adversas, con olas de hasta tres metros de altura. En un comunicado, el Equipo de Búsqueda y Rescate (SAR) precisó que los desaparecidos son un hombre español y tres de sus hijos, y corrigió una información inicial en la que se había incluido erróneamente a la esposa entre los desaparecidos. Los equipos de rescate se han enfrentado a olas de hasta 1,5 metros, fuertes corrientes alrededor de la isla de Padar y lluvias torrenciales que reducen la visibilidad, lo que complica enormemente las tareas. Según una versión preliminar, el motor de la embarcación sufrió una avería que desencadenó el siniestro.