Viviendas, tiendas, bares y peatones. El calor en superficie afecta a todas las personas que habitan y circulan por la ciudad, independientemente de si son residentes o no en la zona. Así lo ha querido mostrar el colectivo Jerez por el clima a través de sus cuentas de TikTok e Instagram, donde a través de un vídeo explican la preocupante situación de la ciudad, con una masa arbórea reducida.
A la denuncia de los "arboricidios" por esta plataforma ecologista, se suma una prueba a pie de calle en una de las vías más conocidas de Jerez: la calle Porvera.
"¿Qué pasa con los árboles de la Porvera?", dice en un primer momento el vídeo. La jacaranda, la especie por excelencia de esta calle, ha desaparecido en el tramo que transcurre desde Chancillería a la esquina con la iglesia de la Vitoria y la calle Ancha. El termómetro digital es como el algodón, y no engaña: entre 10 y 25 grados más de temperatura en superficie y paredes.
"Como veis la diferencia de grados es bastante grande entre no tener árboles y tener árboles", dicen en el vídeo, haciendo hincapié en las políticas públicas de medio ambiente, con objeto de reponer los miles de alcorques vacíos que hay en la ciudad, sin olvidar tampoco a los barrios más poblados alejados del centro histórico.
Más de 10.000 árboles perdidos en la década pasada
"Jerez es considerada una de las ciudades más arboladas de España, contando con más de 100.000 árboles en su territorio urbano y ha sido promotora de un proyecto LIFE+ Modelo de gestión del arbolado urbano de Jerez de la Frontera concedido a nuestra ciudad por parte de la Comisión Europea para la protección y puesta en valor de este patrimonio natural urbano".
Así recoge la Ordenanza de Zonas Verdes y Gestión y Protección del Arbolado en su preámbulo lo que era para muchos jerezanos una verdad incuestionable a comienzos de siglo, culminando en 2010 con ese proyecto, financiado con fondos europeos. Desde entonces, la situación no ha hecho más que empeorar. Jerez perdió más de 10.000 árboles en la década pasada y las reposiciones de árboles han sido, a todas luces, insuficientes. Es una cuestión de emergencia climática.
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