La alcaldesa de Jerez, María José García-Pelayo, renovó este miércoles el tradicional Voto de la ciudad a la Virgen de la Merced, Patrona de la ciudad, en un acto solemne que contó con la presencia de miembros de la Corporación Municipal.
Durante la ceremonia, celebrada en honor a la alcaldesa perpetua y protectora de la ciudad, García-Pelayo destacó la importancia histórica y espiritual de este vínculo, que se remonta a hace más de 700 años.
"Aquí está el Voto de tu ciudad, Madre"
Con palabras cargadas de simbolismo, la regidora recordó que Jerez “cada año se encomienda a los ojos misericordiosos de la Virgen como faro y guía de sus vidas”. Y añadió: “Aquí está el Voto de tu ciudad, Madre, y con él, su agradecimiento eterno por hacernos más libres, más solidarios y mejores también como ciudadanos y como ciudad”.
La alcaldesa agradeció el Patronazgo de la Virgen, al que atribuyó la fuerza para afrontar tiempos difíciles, y pidió su protección para que Jerez pueda seguir avanzando “en trabajo, salud y prosperidad para todo su pueblo”.
Un compromiso que perdura desde 1300
García-Pelayo subrayó que el voto fue acordado por unanimidad por el Concejo de la ciudad en el año 1300, “atendiendo el deseo de los jerezanos”. Desde entonces, generación tras generación ha mantenido esta promesa de fidelidad a la Virgen de la Merced, reafirmada ahora por el Ayuntamiento.
“Gracias, Madre, por seguir atenta a las súplicas de tu pueblo que, desde aquel lejano año, pone en tu mirada el destino de su futuro”, afirmó.
Peticiones para el presente y el futuro
En su intervención, la alcaldesa pidió a la Virgen que su gobierno sea “instrumento de tu amor” y que el trabajo del Ayuntamiento sirva para "aliviar sufrimientos, acompañar a los mayores, generar oportunidades para jóvenes y desempleados, y brindar justicia a los más vulnerables".
"Que este trabajo que desempeñamos, Madre —ha pronunciado—, sea capaz de aliviar los sufrimientos de los enfermos, de dar fraternal acogida a los migrantes, de generar trabajo para los desempleados, de regalar compañía y calor a nuestros mayores, de infundir esperanza y futuro a nuestros jóvenes y también de llevar la justicia a los oprimidos.
“No permitas que estos tiempos difíciles apaguen las ilusiones y las esperanzas que este pueblo tiene depositadas en su futuro”, rogó la regidora.
El acto concluyó con la proclamación de la Virgen de la Merced como "descanso, alegría y esperanza del pueblo jerezano". La regidora jerezana cerró el Voto en nombre de todos los ciudadanos, reafirmando a la Virgen como alcaldesa perpetua.
Con emoción, García-Pelayo finalizó su intervención con un grito que retumbó en la celebración: “¡Viva la Virgen de la Merced! ¡Viva Jerez!”.