Hugo tiene 15 años, es de Jerez y convive desde su nacimiento con la enfermedad de Trevor, una patología extremadamente poco frecuente —afecta a una persona entre un millón— que provoca un crecimiento anómalo de los cartílagos. A esa condición, que ya ha marcado su desarrollo físico y su día a día, se ha sumado en los últimos tiempos un desafío aún mayor: un diagnóstico de cáncer que le ha obligado a iniciar un largo y exigente tratamiento médico.
El proceso ha sido duro y prolongado. Tras once meses de quimioterapia, el adolescente ha logrado superar la enfermedad y ha simbolizado el final de esta etapa tocando la campana de la esperanza en el Hospital de Jerez.
La madre de Hugo, Inés, ha puesto palabras a ese recorrido a través de sus redes sociales, donde ha descrito con crudeza y emoción el camino recorrido por su hijo. En su mensaje, ha relatado que “Después de 11 meses de tratamientos, mucositis, infecciones, dolores, fatigas, mareos, cansancio, ansiedad, miedos y emociones, por fin llegó tu final de quimio, que suene una y otra vez la campana de la esperanza. Tócala, mi vida, con todas tus fuerzas".
"Que llegue a todos los rincones y den ánimo, fe y esperanza a todos los niños que estén padeciendo esta enfermedad", añadía en una declaración llena de emoción.
El reconocimiento del Xerez CD tras un ejemplo de superación
Superada esta etapa, el entorno de Hugo ha querido reconocer públicamente su fortaleza. El Xerez CD le rindió un homenaje en el último partido del equipo. Antes del encuentro, el club le hizo entrega de una camiseta con el número 12. Tras imponerse por la mínima al filial del Málaga, el conjunto azulino quiso dedicar el triunfo al joven jerezano. “La verdadera victoria de hoy, va por ti Hugo, va por ti campeón", apuntaron desde el club.
Hugo se ha convertido en todo un ejemplo de resiliencia frente a la enfermedad, tanto por la convivencia prolongada con una dolencia rara como por la reciente superación del cáncer.




