Ustea informa de que la delegación territorial da marcha atrás tras la protesta de los padres del centro.
La delegación territorial de Educación en Cádiz reconsidera su decisión. Los padres del CEIP García Lorca, protestaron esta semana para intentar impedir la pérdida de una línea de Infantil de tres años y, a tenor de lo que informan desde el sindicato Ustea Cádiz, lo han conseguido.
Una vez cerrado el plazo de matriculación, hay matriculados 26 niños, dos de ellos con necesidades educativas especiales, que no habían remitido la documentación pertinente a tiempo, de ahí que no se concedieran las dos líneas, a pesar de que el mínimo para tener dos líneas es 28. Desde Educación habían dado la orden de no permitir ninguna matriculación más –pueden llegar niños sin plaza en otros colegios– hasta nueva orden.
La protesta, finalmente, parece haber surtido efecto y los alumnos de tres años del CEIP García Lorca se repartirán en dos aulas. Así se impide la pérdida de un profesor, el de Educación Especial, que al no contar con dos líneas se quedaba sin trabajo. “Estamos abandonados”, se queja Cristina Mirabet, vicepresidenta de la Ampa, que también apunta a otras deficiencias del centro, como el mal estado de algunos muros o la proliferación de gatos.
Además, no tienen comedor propio y tienen que desplazarse con los niños, a las dos de la tarde, al CEIP San Vicente de Paúl, para lo que hay que cruzar por una avenida muy transitada.
Con esta medida, los padres y madres de los alumnos del CEIP Federico García Lorca salvan este macth ball, aunque seguirán peleando para conseguir otras mejoras que “tanta falta hacen” en el colegio.
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