La alcaldesa ha presentado la Feria del Caballo, dedicada a Recevin, la red europea del vino de la que el gobierno local del PP quiso darse de baja por su "baja utilidad" y a la que ahora rinde tributo desde un evento de interés turístico internacional. Pelayo vende como "mejoras" recuperar dos años después un día más de feria y los fuegos artificiales que erradicó por la crisis. "Hay que ir generando ilusión", asegura.
"Esto son mis principios, si no te gustan tengo otros". El gobierno local del Partido Popular en Jerez parece invocar por momentos al espíritu más puramente marxista (de Groucho). En apenas 19 meses se hace una cosa y radicalmente la contraria. "Si quieren decir que nos han echado, es igual porque no es un problema de dinero, sino de no duplicar esfuerzos y vamos a estar en todo lo que sea productivo para la ciudad". "Se habla de Recevin. ¿Qué es Recevin? La red europea de ciudades del vino. Es decir todas las ciudades europeas productoras de vino apostaron por Jerez para que la ciudad fuese capital de ese noble producto, ese gran producto, ese milenario producto (...) La Feria la dedicamos a ese gesto que tuvo Europa de reconocernos como capital europea del vino". La primera manifestación es del delegado de Turismo, Cultura y Fiestas, Antonio Real, en julio de 2012. La segunda la ha pronunciado la alcaldesa, María José García-Pelayo, en la presentación hoy lunes de la inminente Feria del Caballo, dedicada a Recevin.
Pelayo y parte de su equipo de gobierno junto a representantes de González Byass, esta noche.
De darle de baja al Ayuntamiento en la red, que se iba a hacer efectiva en enero de 2013, a dedicarle un evento declarado de interés turístico internacional. De poner en duda la utilidad de la organización, "es cuestión de no duplicar esfuerzos ni gastos", insistía Real, a que Pelayo explicase recientemente en el Congreso de los Diputados el impacto turístico y económico de Jerez como Ciudad Europea del Vino, designación que en noviembre pasado hizo Recevin en detrimento de la gallega Cambados. Pelayo, que decidió suprimir a principios de legislatura las dedicatorias de la Feria del Caballo -una costumbre que se adquirió en la legislatura anterior-, ha decidido recuperarlas ahora. Al igual que rescata el formato tradicional de la Feria de las últimas décadas y, un clásico, los fuegos artificiales del encendido del alumbrado. Ambas cosas, sin complejos, ha decidido venderlas como "mejoras", "toquecitos", novedades de esta nueva edición de la Feria del Caballo que arranca este domingo.
"Cuando está todo inventado es muy difícil mejorar", ha dicho García-Pelayo en su 'speech' ante los alrededor de 500 invitados que han acudido esta noche a la bodega González Byass. En todo caso, ha puntualizado la regidora popular, "siempre damos algún toquecito para mejorar en relación con años anteriores: este año recuperamos los fuegos artificiales y un día más de Feria. Dijimos que la cosa había que recortarla porque la situación no estaba... este año no es que vayamos a irnos ni mucho menos, el Presupuesto de la Feria es un Presupuesto que gusta porque todavía contiene el gasto".
"Hay fuegos artificiales pero no vamos a tirar la casa por la ventana pero sí hay que ir dando pasos que vayan generando ilusión, generando buenas expectativas con respecto a Jerez" (sic). Habrá que andar con cuidado porque, según el diccionario de la RAE, 'ilusión' significa en su primera acepción: "Concepto, imagen o representación sin verdadera realidad, sugeridos por la imaginación o causados por engaño de los sentidos". Con dos elecciones en un año, ya se sabe, cualquier cosa es posible. Por cierto, la Feria contará con el clásico millón de bombillas de todos los años en su alumbrado, 216 casetas y un día con los cacharritos low cost.
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