Miguel, Álvaro, Alberto y Yolanda se han desplazado a la Comisaría de Jerez para agradecer a la Policía Nacional que su nieto está vivo. Esta familia de Estella del Marqués ha tenido un bonito gesto con los miembros de la unidad UPR de la Policía Nacional. Fueron ellos quienes les ayudaron cuando su nieto sufrió de forma repentina un grave incidente de salud.
Los hechos ocurrieron recientemente cuando los agentes que se encontraban de servicio uniformado en las calles de Jerez. Pudieron observar como los ocupantes de un vehículo solicitaban ayuda desesperadamente, al aproximarse pudieron comprobar que había un niño en los brazos de su abuela con semblante muy pálido y totalmente desvanecido.
Según recuerda el Cuerpo, los policías intervinieron de forma inmediata aplicando sus conocimientos en primeros auxilios, al comprobar que el menor no respondía a estímulo alguno, pero que aún conservaba las constantes vitales, optaron por escoltar al vehículo con el niño y sus abuelos, abriéndoles paso con los vehículos oficiales mediante su medios luminosos y acústicos hasta llegar al Hospital Universitario del SAS de Jerez.
En la comisaría, los abuelos recordaron esa "angustia y desesperación" que vivieron ese día cuando tuvieron que desplazar en su coche con el pequeño desvanecido, pidiendo ayuda desde el turismo en dirección al Hospital de Jerez, sin ser auxiliados por nadie hasta que toparon con las furgonetas de la UPR de Jerez.
Durante el recorrido, los policías se pusieron en contacto con el Hospital para informar de la asistencia inmediata del pequeño. Los agentes alertaron de los que ocurría y de que se dirigían hacia el Hospital con un menor gravemente enfermo a través de la emisora policial y la sala operativa del 091.
A la llegada al Hospital de Jerez, uno de los agentes tuvo que portar en sus brazos al pequeño hasta dejarlo en la zona de Urgencias, donde el personal sanitario de pediatría ya estaba preparado para aplicar al pequeño las mejores atenciones médicas por el síncope que había sufrido.
El menor quedó ingresado hasta que pudo ser dado de alta a las pocas horas, ya ha sido diagnosticado de su dolencia y los abuelos portan en todo momento la medicación necesaria en caso de repetición del cuadro severo. Gracias a la rápida actuación de la Policía Nacional el pequeño se encuentra totalmente recuperado y su familia está muy agradecida.
El comisario jefe Francisco García Carrasco en compañía de los intervinientes, les ha recibido en la Comisaría y, además de agradecer el gesto a los afectados, los ha felicitado por el feliz desenlace. Según traslada la Policía, "hemos tenido en Jerez un momento muy emotivo y de los que de verdad te hacen sentir muy orgullosos".
La placa entregada recoge las siguientes palabras: “En agradecimiento a la Policía Nacional de Jerez de la Frontera por salvar la vida de mi niño.” “Gracias a ellos mi Brujito sigue hoy con nosotros”. “Nos faltará vida para agradeceros lo que hicisteis”. “Un millón de gracias”.
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