El PP andaluz considera que "Andalucía es la más beneficiada en el reparto de los fondos hasta 2020" y la Junta cree que "se quita a Andalucía para dárselo a otras comunidades autónomas gobernadas por el PP".
El nuevo reparto de la PAC (Política Agraria Común), que se ha saldado con la pérdida de 211 millones para Andalucía con respecto al período 2007-2013, sigue dando que hablar. La comunidad andaluza será la única que tendrá menos fondos, un total de 1.903 millones de euros, el 23,7% del total (antes recibió un 26%), a lo que hay que añadir la rebaja de la aportación del Ministerio (47 millones de euros menos) y otra rebaja de 160 millones en ayudas directas.
Sin embargo, el PP andaluz considera que "Andalucía es la más beneficiada en el reparto de los fondos hasta 2020", ya que "la propuesta del anterior Gobierno socialista suponía una pérdida de 1.300 millones de euros". El presidente del PP de Cádiz y portavoz adjunto del PP en el Senado, Antonio Sanz, asegura que "el Gobierno ha aplicado medidas correctoras para que Andalucía no pierda 200 millones en Desarrollo Rural si se hubieran aplicado criterios objetivos en el reparto de fondos".
El baile de cifras es constante. El PP acusa a la Junta de no ejecutar 970 de los 2.100 millones que disponía de la PAC 2007-2013 para desarrollo rural, por lo que con los 1.906 millones que recibirá Andalucía "se ha aumentado en 800 millones lo ejecutado en el periodo anterior, a lo que hay que sumar los 1.600 millones en ayudas directas, garantizando el mantenimiento de las mismas". Con todo, la provincia perderá entre 50 y 60 millones de euros en este periodo, según estimaciones de Miguel Pérez, secretario de Coag Cádiz, reducción que afectará sobre todo al sector hortofrutícola y al vitivinícola.
Pérez considera que este reparto ha seguido "criterios políticos", al igual que la consejera de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural, Elena Víboras, quien asegura que "se quita a Andalucía para dárselo a otras comunidades autónomas gobernadas por el PP". Aunque hay quien apunta a la oposición de la Junta a la venta de la finca La Almoraima de Castellar de la Frontera (Cádiz), que el Gobierno central pretende vender para convertirla en un complejo turístico de lujo, como uno de los motivos de este reparto para Andalucía. Por si fuera poco, de telón de fondo sobrevuela el conflicto por la venta de la Almoraima, donde las pretensiones del ministro jerezano Arias Cañete han chocado frontalmente con la negativa de la Junta a vender la finca pública.