La Audiencia Provincial de Huelva acoge esta semana la segunda jornada del juicio contra Manuel Quero, acusado de causar la muerte por atropello de su pareja, la reportera gráfica Alicia Rodríguez, la madrugada del 13 de junio de 2021 en Marmolejo (Jaén). Este lunes se constituyó el jurado popular, encargado de decidir si fue un accidente fatal o un hecho delictivo intencionado.
A las puertas del juzgado, Santiago Rodríguez, padre de la víctima, ha reclamado “justicia” y que el acusado “vaya a la cárcel”. Visiblemente afectado, expresó su dolor por el largo tiempo transcurrido hasta la celebración del juicio y confesó que no quiere ver al acusado, de quien dijo que “lo que ha hecho ha sido una cosa muy mala”.
Fiscalía descarta intención de matar, pero pide condena por homicidio imprudente
Durante la exposición de sus conclusiones finales, la Fiscalía de Huelva ha mantenido que los hechos constituyen un delito de homicidio imprudente, para el que solicita dos años de prisión. No obstante, ha elevado la petición de retirada del carnet de conducir de dos a cuatro años.
La fiscal sostiene que el acusado movió el vehículo “sin las mínimas precauciones, a oscuras y sin cerciorarse de si ella estaba en su trayectoria”, pero sin voluntad de atropellarla. Apoyó esta tesis en los informes del Equipo de Reconstrucción de Accidentes de Tráfico (ERAT) de la Guardia Civil, que concluyeron que hubo intencionalidad de mover el coche, pero “no de matar”.
Acusación particular habla de asesinato con alevosía y ensañamiento
En contraste, la acusación particular, que representa al padre de la víctima, solicita 28 años de prisión, al considerar que se trata de un delito de asesinato con dolo, alevosía y ensañamiento.
Por su parte, las acusaciones populares, ejercidas por la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Huelva, también elevan las penas solicitadas. La Junta pide 15 años por homicidio doloso, con el agravante de parentesco. El Ayuntamiento solicita 25 años por asesinato agravado por parentesco.
Ambas partes destacan las contradicciones del acusado desde el primer momento, su estado tras el consumo de drogas y alcohol “sin tener mermadas sus facultades”, y la contundencia de las pruebas periciales.
La defensa insiste en que fue un accidente
La defensa sostiene que se trató de un accidente sin intencionalidad, porque iba a aparcar y no la vio "en ningún momento", y pide la libre absolución, aunque de forma subsidiaria acepta que pudiera considerarse homicidio imprudente.
El próximo lunes se entregará al jurado el objeto de veredicto, paso previo a la deliberación sobre la culpabilidad o no del acusado.



