Los residentes en los cinco pisos, de un total de once, que aún están habitados en la finca de Javier de Burgos 19, en pleno centro histórico y turístico de Cádiz, han acordado iniciar medidas de protesta para reclamar agilidad en las medidas de ayuda.
La finca presenta un alto grado de deterioro y unas pésimas condiciones de seguridad y salubridad, como ha reconocido el Ayuntamiento de Cádiz en tres informes distintos de la Delegación de Urbanismo.
En el edificio, en el que viven ocho menores de edad y tres mayores de 65 años, hay enormes agujeros en techos y paredes, vigas podridas al descubierto, tuberías de aguas fecales rotas que vierten su contenido al suelo, ratas, cucarachas, humedades o desprendimientos de varios tamaños.
Como agravante en este caso, frecuente en algunos barrios de Cádiz hasta la primera década del siglo, la propiedad corresponde a la empresa pública Sareb (conocida como banco malo) que se hizo con él en 2021 por las grandes deudas contraídas por el anterior dueño.
Reunión en la azotea
Los vecinos se reunieron en la noche de este miércoles para valorar las últimas novedades en un caso que ha creado gran alarma después de que fuera denunciado por la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía a principios de este mes de junio.
Con el Ayuntamiento de Cádiz como una de las entidades que reclama un realojo urgente por el estado del inmueble, la propietaria Sareb se vio obligada a publicar una nota en la que admite la pésima situación.
En ese mismo escrito público, el banco malo y público (participado casi en un 50% por el Estado) ofrece a los afectados "soluciones habitacionales", en forma de realojo en uno de sus pisos en la ciudad, 40 según el Ayuntamiento.
Los residentes en el edificio, o sus representantes como en el caso de la mujer de más edad, acordaron por unanimidad exigir a la Sareb que concrete ese ofrecimiento de pisos de realojos, que diga cuáles son y dónde están de forma urgente para poder salir de una finca tan indigna.
"Necesitamos que los pisos que nos ofrezcan estén en el término municipal de Cádiz. Tenemos los trabajos y las plazas escolares aquí, no podemos permitirnos ir y venir todos los días"
Como condición previa, sólo ponen una, que los nuevos pisos "estén en el término municipal de Cádiz, no en San Fernando o en otros municipios como nos han dejado caer".
"Tenemos los trabajos y las plazas escolares, o de instituto, aquí en esta ciudad y no nos podemos permitir irnos a otra para tener que trasladarnos todos los días", detalla un portavoz.
Como símbolo de sus reivindicaciones y mientras el pleno municipal de Cádiz, en su sesión de la última semana de junio, o la dirección de Sareb trata su caso han decidido hacer ver sus peticiones de forma simbólica.
Durante la última semana de junio colgarán de sus ventanas o pequeños balcones sábanas y pancartas para pedir que las soluciones prometidas lleguen cuanto antes. "Cada noche aquí es un infierno, llevamos cinco años así, pidiendo soluciones, no podemos esperar más".
