El gobierno municipal de Cádiz se comprometió a colaborar en el realojo de las cinco familias que viven en la finca infame de la calle Javier de Burgos, en pleno centro turístico y comercial de la ciudad.
Posteriormente, 24 horas antes del último pleno municipal, rectificaba ese anuncio para dejar toda la responsabilidad de la reubicación en la sociedad pública Sareb (banco malo), propietaria del inmueble.
En esa sesión plenaria, después del desgarrador discurso de una de las afectadas por los desprendimientos y grietas, las ratas, cucarachas, humedades y aguas fecales, el equipo de gobierno cambió de opinión de nuevo y decidió volver a apoyar el realojo.
Una semana después, según la oposición, vuelve a desentenderse. Este vaivén constante es, al menos, la versión del grupo municipal Adelante Izquierda Gaditana (AIG).
"En una ciudad que pierde población, sólo les ofrecen la alternativa de irse a San Fernando cuando ya han dicho que no pueden"
Esta mitad de la oposición municipal denuncia el incumplimiento, por parte del equipo de Gobierno, del acuerdo aprobado por unanimidad en el pleno ordinario del pasado 26 de junio relativo a la situación de las familias "que malviven en la infravivienda" de Javier de Burgos, 19.
La oposición afirma que, después de ese pacto, "lo único que ha hecho Bruno García -junto con sus concejales de Urbanismo, Vivienda y Asuntos Sociales- ha sido lavarse las manos".
"Este miércoles se reunieron con la portavoz de las familias para animarlas a abandonar la capital gaditana e instalarse en San Fernando", aceptando así la única propuesta ofrecida por la Sareb -sociedad propietaria del inmueble- y que días atrás ya rechazaron los inquilinos.
"Ésta es la forma de proceder del alcalde de Cádiz con vecinos de la ciudad que están viviendo una situación dramática e indigna. Les señala la puerta de salida tan sólo una semana después de comprometerse en pleno a reubicarlas en la capital gaditana".
David de la Cruz, portavoz de AIG, considera un agravante que el regidor tome esta postura "aún sabiendo que las familias, con ocho menores de edad -y tres mayores de 65 años- no quieren marcharse de la ciudad al tener aquí sus trabajos y sus centros educativos".
Para el líder de la formación de izquierdas es "una auténtica vergüenza y un despropósito" que Bruno García y sus ediles "se desentienda de esta forma de estas familias, haciendo caso omiso al protocolo municipal existente para situaciones de emergencia como ésta".
"Que se usen pisos turísticos"
Como alternativa, asegura De la Cruz, el Ayuntamiento podría estudiar "la posibilidad de realojarlos temporalmente en pisos turísticos de la ciudad, sufragando esos alquileres la propia Sareb".
"Bruno García vuelve a incurrir en una clara dejadez de funciones, pues no tiene la más mínima intención de velar por la seguridad de estos inquilinos y de sus menores ni tampoco de buscarles una alternativa habitacional transitoria".
"Ya lo hizo -añade- presentando la enmienda de sustitución a nuestra propuesta con el fin de lavarse las manos, y esta semana, tras comprometerse a un realojo, lo ha vuelto a hacer invitando a las familias a irse de Cádiz".
Para la coalición, es aún más llamativo que el equipo de gobierno muestre esta actitud "en un contexto de pérdida de población constante, Bruno García señala la puerta de salida a nada menos que cinco familias con ocho menores", lamenta De la Cruz.