La Policía Local de Cádiz, algunos de cuyos agentes y representantes sindicales celebraron en público el triunfo electoral del Partido Popular tras seis años de duro conflicto con la Alcaldía anterior, verá mejorada su dotación de personal y material antes de que se cumpla un año de la llegada de Bruno García al cargo.
La junta de gobierno local ha confirmado el inicio del proceso de selección para 25 nuevas plazas de agentes, así como un pliego de contratación para arrendar 13 nuevos vehículos.
"Supone el cumplimiento de una promesa que hicimos ante el cuerpo de la Policía Local durante el acto de celebración del día de su patrón, en el que reiteramos que tendríamos el máximo apoyo a toda la labor que realizan a diario para la ciudadanía", matiza el alcalde.
La convocatoria para adjudicar 25 nuevas plazas, afirma el regidor, "vendrá a mitigar en parte las deficiencias de personal que tiene este colectivo”. En esta selección, asegura el Ayuntamiento, se suman las ofertas públicas de los años 2021, 2022 y 2023 que no habían sido ejecutadas hasta ahora.
La oposición de acceso contará con una primera prueba de conocimientos, una segunda de carácter físico y una tercera psicotécnica. Los aspirantes que superen el concurso ingresarán en la escuela, en la que se formarán hasta empezar a prestar su servicio como agentes de la Policía Local.
Respecto a los medios materiales, el gobierno municipal ha dado curso a un pliego para el arrendamiento de 13 vehículos: cuatro patrullas tipo SUV con motores híbridos, tres furgonetas y seis motocicletas. El precio de este contrato es de 727.161 euros para los próximos cuatro años.
Como remate, el alcalde detalla la adquisición de un nuevo uniforme de verano para toda la plantilla, que tendrá un coste añadido de 60.000 euros.
Bruno García respalda el anuncio con una declaración de apoyo: "Se trata de un compromiso firme de este equipo de Gobierno con la labor imprescindible que hacen cada una de las personas que integran la Policía Local de Cádiz".
Como ejemplo de esta tarea destaca el dispositivo de control de tráfico diario que se pone en marcha en la conexión del puente Constitución de 1812 con las avenidas de Las Cortes y de Huelva con motivo del cierre por obras del viaducto José León de Carranza, desde el 17 de marzo hasta, previsiblemente, inicios de julio.
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