Han transcurrido sólo dos jornadas de huelga en el sector del metal, miércoles y jueves. La primera resultó tensa, violenta e incendiaria. La segunda, bastante más calmada. Ahora llega el regreso a la negociación con la amenaza de la huelga, ya indefinida e incontrolable en las calles, a partir del lunes.
La sede del servicio de arbitraje y mediación laboral de la Junta (Sercla) en el centro de Jerez es el escenario de un encuentro que comenzaba a las 11.30 de este viernes.
La Federación de Empresas del Metal de Cádiz (Femca) y los sindicatos convocantes, con UGT y Comisiones Obreras como los mayoritarios, dicen acudir con esperanzas de acuerdo y mentalidad "positiva y propositiva".
A la llegada a la mesa de diálogo, el responsable de Industria en UGT Cádiz, Antonio Montoro, detallaba que el objetivo es "un convenio colectivo de futuro, que dé tranquilidad a los trabajadores y ofrezca garantías de cumplimiento".
"Echaremos el tiempo que tengamos que echar pero de aquí tenemos que salir con un acuerdo, porque así nos lo han transmitido los trabajadores", adelantaba Montoro a las puertas de la oficina jerezana del Sistema Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales (Sercla).
El secretario de Industria de Comisiones Obreras, Pedro Lloret, coincidía a su llegada en ofrecer "la mejor disposición para llegar a un acuerdo que ofrezca un convenio colectivo justo, social y solidario".
Además de los tres puntos en discordia, sindicatos como CTM exigen que el convenio acordado sea aplicado de forma estricta, sin los "incumplimientos" y "represalias" habituales hasta ahora
El representante sindical también se mostraba dispuesto a tener "una reunión muy larga si hace falta, eso da igual, lo importante es el resultado positivo".
Los principales puntos que separan a las dos partes son tres: actualización de salarios según el IPC, aplicación de un plus por manejo de tóxicos nocivos (54 euros mensuales per cápita) y mejores condiciones para los, cada vez más, fijos discontinuos.
"Hacer lo posible" para que no llegue el lunes
A esas tres grandes reivindicaciones, grupos sindicales menos representados en los comités pero muy influyentes, como la Coordinadora de Trabajadores del Metal añaden algo esencial: "La aplicación estricta del convenio que se acuerde, algo que no ha sucedido en los últimos años".
"Hace más de una década que los incumplimientos han sido graves y constantes, como la obligación de realizar horas extras sin remunerar". A esas violaciones añaden incumplimientos en materia de seguridad e incluso "coacciones, listas negras y represalias laborales" contra los trabajadores que las denuncian.
El máximo representante de la patronal gaditana del sector, Femca, es José Muñoz. A la entrada de la sede del Sercla en Jerez, para la cuarta reunión celebrada en una semana, asegura que el espíritu empresarial es "hacer lo posible para que no llegue la huelga indefinida este lunes. Haría un daño irreparable".
