La Asociación de la Prensa de Cádiz (APC) y el Colegio Profesional de Periodistas de Andalucía (CPPA) han expresado este miércoles su firme condena a las agresiones físicas y verbales sufridas por trabajadores de medios de comunicación durante la cobertura informativa de la huelga del metal en la Bahía de Cádiz. Ambas organizaciones profesionales han reclamado respeto a la labor periodística, recordando que el derecho a la información es fundamental en una sociedad democrática.
"Tratar de silenciar a los periodistas mediante agresiones y presiones es una afrenta directa a nuestra democracia", han advertido en un comunicado conjunto, en el que muestran su solidaridad con los profesionales afectados y ofrecen asesoramiento legal a través de sus servicios jurídicos.
La APC y el CPPA han subrayado además que no se trata de un hecho aislado. "No es la primera vez que periodistas gaditanos sufren agresiones, amenazas o interrupciones en el desempeño de su labor", alertan. En este sentido, advierten del incremento de las presiones, especialmente a través de redes sociales, muchas veces bajo el amparo del anonimato.
Uno de los periodistas agredidos ha relatado a este medio cómo fue empujado de forma violenta mientras cubría la protesta: “De repente se me lanzó un tío. Si no llego a echarme contra un coche, acabo en el bordillo. La cámara salió volando y el estabilizador ha quedado destrozado".
El informador asegura que en el momento de la agresión no grababa primeros planos y no llevaba distintivo alguno que identificara el medio para el que trabaja. “Lo único que pasaba es que no querían que grabáramos caras. En ese instante estábamos enfocando la línea policial. Nos han tirado piedras desde el principio hasta el final”.
Un periodismo necesario para que haya testigos
También la Asociación de la Prensa de Jerez ha querido mostrar su respaldo a los profesionales afectados: “Cuando hay alguien que no quiere testigos, es cuando más necesario se hace el periodismo. Todo el apoyo a los agredidos y nuestra condena más firme a quienes van por ahí amenazando y pegando a quienes están simplemente haciendo su trabajo”.
Las organizaciones profesionales han defendido la profesionalidad con la que los periodistas están cubriendo el conflicto laboral en el sector del metal, y han insistido en la necesidad de trasladar a la opinión pública, con rigor y veracidad, las causas que han motivado la huelga.
