Unos 300 jóvenes católicos llegados de la provincia de Murcia improvisaron en la mañana de este martes un inesperado baile colectivo a pocos metros del Ayuntamiento de Cádiz, en la plaza de San Juan de Dios.
Los espontáneos bailarines eran adolescentes y veinteañeros adscritos a tres parroquias (no organizados alrededor de ningún colegio concertado) de las ciudades de Yecla y Murcia, camino del "encuentro de la juventud con el Papa Francisco" que comienza este martes en Lisboa y culmina el próximo sábado.
Ante el asombro de cientos de turistas, llegados de varios cruceros, y de unos pocos lugareños, los concentrados empezaron a interpretar danzas en corros durante muchos minutos.
Los responsables del grupo, de riguroso negro y con alzacuellos, detallaron que se trata de feligreses adscritos a varias parroquias de Yecla y Murcia.
"Venimos en autobús, no vamos a coger ningún barco. Paramos primero en Cádiz, luego en Sevilla, Mérida y Cáceres, antes de Lisboa", concretaba un religioso.
La capital portuguesa reúne a más de 600.000 jóvenes de toda Europa, especialmente, entre este martes y el sábado.
Los efectos de este encuentro periódico, en 2023 en la Península Ibérica, dejan ver sus efectos en muchas localidades de España y Portugal. En esta jornada fueron evidentes en Cádiz.


