El diputado provincial de Deportes y alcalde de María, José Antonio García Alcaína, será propuesto como nuevo presidente de la Diputación de Almería tras el cese de Javier Aureliano García. La salida de este último se produce después de su detención e investigación en la segunda fase del caso mascarillas, que examina el supuesto cobro de comisiones mediante contratos irregulares en el seno de la institución provincial.
La propuesta de García Alcaína supone un movimiento inmediato para garantizar la continuidad al frente del gobierno provincial, tras el impacto político que ha generado la investigación judicial.
El caso ha obligado al PP de Almería a reorganizar de forma acelerada su estructura institucional y orgánica, en un momento en el que el partido afronta además cambios internos de relevancia.
Paralelamente, el ascenso del consejero andaluz de Agricultura, Ramón Fernández-Pacheco, a la presidencia del PP de Almería ha provocado una reconfiguración del organigrama provincial de la formación.
Fernández-Pacheco asume así el liderazgo que compatibilizaba hasta ahora Javier Aureliano García, lo que deja libre el puesto de secretario general del partido en la provincia. Ese cargo será ocupado por el actual delegado territorial de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad, Francisco González Bellido, según fue anunciado este fin de semana.
En busca de la estabilidad interna
González Bellido se incorpora a la dirección del PP almeriense en un momento marcado por la necesidad de reforzar la estabilidad interna y la imagen pública del partido tras la detención de García.
Los nombramientos fueron comunicados directamente por Fernández-Pacheco durante la junta directiva del PP de Almería, celebrada en Roquetas de Mar.
La reunión contó con la presencia del resto de presidentes provinciales del PP andaluz, así como del coordinador general del partido en Andalucía, Nacho Romaní, y del secretario general del PP-A, Antonio Repullo, en una cita que ha servido para escenificar el respaldo orgánico a la nueva dirección.
