El histórico profesor de baile Fernando Belmonte ha fallecido a los 81 años. El artista nacido en Cádiz en 1942 era uno de los coreógrafos más importantes de Jerez. Creador del histórico Ballet Albarizuela, se consideraba “sobre todo bailaor”.
Fernando era hijo y sobrino de toreros, pero tomó otro camino diferente al de su familia. De la mano de La Paquera se fue a Madrid, donde comenzó a bailar “para el gran Antonio”, convirtiéndose en primer bailarín.
Con él actuó en el último cumpleaños del presidente Kennedy en la Casa Blanca. Más tarde creó su propia compañía y durante los últimos años ha dedicado la mayoría de sus esfuerzos a la enseñanza. Fundó la legendaria academia jerezana de la calle Bizcocheros y el Ballet Albarizuela, del que han salido figuras como Joaquín Grilo.
El artista se consideraba tanto bailaor como bailarín, aunque afirmaba que lo que más tiraba era ser bailaor de Jerez. “He sido un bailarín clásico español y he bailado todo tipo de baile”, decía en una entrevista pasada en la que también afirmaba que lo que mejor le definía eran “la farruca y las alegrías”.
La alcaldesa de Jerez, María José García-Pelayo, ha mostrado, en nombre de la Corporación municipal, su pesar por el fallecimiento de Belmonte, uno de los bailaores más reconocidos y referentes del flamenco.
El gobierno municipal ha subrayado el extenso legado que Fernando Belmonte ha aportado al flamenco, una trayectoria por la que recibió el reconocimiento en el XXVII Festival de Jerez y una gala homenaje en 2010 en el transcurso del Festival. Desde el Ayuntamiento, manifiestan su profunda tristeza por esta importante pérdida para la cultura de Jerez.


