De Escribanos o del Cabildo Viejo: la plaza de San Dionisio

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Un poco de historia sobre la actual plaza de la Asunción.

O plaza de la Asunción, como se le llama desde los años 50, a raíz de la inauguración del monumento a la Virgen de la Asunción que preside el centro de esta céntrica plaza. Como dijimos en una edición anterior de Antes todo esto era bodega es precisamente ese monumento a la Asunción el cambio más notable entre las fotos, con casi un siglo de diferencia, que ilustran este artículo. A finales del siglo XIX, con motivo de la inauguración del Cabildo como Biblioteca Municipal, también tuvo el nombre de Doctor Revueltas y Montiel, en dedicación a este doctor y médico jerezano.

Pero si algo hace distintiva a la plaza de San Dionisio —como se le llamó originalmente en el siglo XV— junto a su estratégica posición en el centro de la ciudad es la conjunción del arte mudéjar, el renacentista y el neoclásico. Es decir, San Dionisio, el Cabildo Antiguo y sus palacios. No es casualidad el nombre que llevó a partir del siglo XV, la plaza de Escribanos, ya que colinda con la calle Letrados y además acoge el Cabildo Viejo construido en 1575 —antiguo Ayuntamiento de Jerez y de 1873 hasta hace no mucho la Biblioteca Municipal—. La Iglesia de San Dionisio acompaña la armonía de una plaza en la que además se encuentran dos de las casas palacios más bellas de la ciudad, por ejemplo el Palacio de la Condesa de Casares, en el número 2, donde se encontraba en época moderna la Casa de la Justicia.

Hoy, sin embargo, estas casas palacio se encuentran en una situación que difiere mucho con su glorioso pasado. Nada nuevo en el centro de Jerez. La plaza de la Asunción, uno de los focos administrativos y centros neurálgicos de la ciudad, sigue siendo un lugar concurrido pero no goza del prestigio que tuvo en tiempos andalusíes —cuando en San Dionisio estaba la mezquita más céntrica de Sharish—, en época medieval o en los tiempos modernos. Algunos historiadores del arte y vecinos del centro histórico lo han materializado magníficamente con sus críticas hacia los veladores en emplazamientos con un patrimonio histórico-artístico tan rico como el de esta plaza. A la foto pueden remitirse.

 

 

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