El desatino pudo sobre la razón: un Lunes Santo para olvidar

La Cena y La Viga decidieron no salir; las restantes volverán al mediodía del domingo desde la Catedral; se echaron a la calle incluso con lloviznas hasta que un chaparrón lo partió todo

El desatino pudo sobre la razón: la lluvia rompió el Lunes Santo. Un costalero exhausto tras salir del paso del Señor de la Paz ya en la Catedral.
El desatino pudo sobre la razón: la lluvia rompió el Lunes Santo. Un costalero exhausto tras salir del paso del Señor de la Paz ya en la Catedral. MANU GARCÍA

Se cumplieron los pronósticos. Estaba cantado que en la tarde del Lunes Santo llovería; así fue pero con unas precipitaciones que empezaron muy débiles y sobre las 20 horas dejó caer un gran chaparrón que pilló en la calle a Candelaria, Amor y Sacrificio y a La Paz, mientras que La Sed pudo llegar a la Catedral. La mojada fue de época para estas tres cofradías. El palio de La Candelaria llegó a San Francisco, el misterio entró en la Catedral. La cofradía de Madre de Dios buscó refugio en Santo Domingo, La Paz se quedó en la Seo al igual que La Sed. Amor y Sacrificio regresó a Madre de Dios entrando a las 22,10 horas. El resto saldrán de la Catedral el domingo tras la misa de Resurrección, que se inicia a las 11 horas.

La Sed por Cristina ca mino de San Juan de Letrán buscando refugio.  ESTEBAN
La Sed por Cristina ca mino de San Juan de Letrán buscando refugio.  ESTEBAN
Cuando la tarde prometía, La Sed y el cortejo camino del centro.   ESTEBAN
Cuando la tarde prometía, La Sed y el cortejo camino del centro.   ESTEBAN 

Así quedó ayer la cosa tras el espanto de la tarde. De antemano se sabía que a más de una cofradía no le temblaría el pulso en echar a su hermandad puertas a fuera del templo. Es lo que tiene cuando tras dos años sin salir, las ganas pueden a la razón. Habrá que insistir en un principio básico que parece haberse olvidado: la lluvia es incompatible con las procesiones. Tratar de hacer lo contrario es un despropósito.

El interior de San Marcos con los pasos preparados y los nazarenos preocupados si salían o no; así final no pudo ser.   ESTEBAN
El interior de San Marcos con los pasos preparados y los nazarenos preocupados si salían o no; así final no pudo ser.   ESTEBAN
Nazarenas, ayer, llorando al conocerse que se suspendía la salida.   ESTEBAN
Nazarenas, ayer, llorando al conocerse que se suspendía la salida.   ESTEBAN 
El palio de La Paz y Concordia, ayer durante del retranqueo, frente la misterio en el interior del templo a puerta cerrada. ESTEBAN
El palio de La Paz y Concordia, ayer durante del retranqueo, frente la misterio en el interior del templo a puerta cerrada. ESTEBAN

La razón debe mandar cuando llega el tiempo de lluvia en Semana Santa. No vale trampear: salir para ver hasta dónde se llega o buscando la Catedral para refugiarse hasta otro día más propicio e incluso darse un vueltecita por el barrio. Sin entrar en evaluar lo que hizo cada una -serán los hermanos los que pidan responsabilidades a sus respectivas juntas-, de las previsiones se sabía desde hacía muchas horas que el agua caería sí o sí. Al final, capotes puestos sin que la imagen se pudiera ver, calles semi vacías y el miedo metido en el cuerpo por el cielo encapotado y amenazante; pasos corriendo, los cortejos apretando el paso -afortunadamente se mantuvo la compostura- y todo lo que es normal, quebrado de tal forma todo, que estar en la calle no tenía ningún sentido, rozando el ridículo.

El paso del Señor de La Paz, ayer, ya en la Catedral.    MANU GARCÍA
El paso del Señor de La Paz, ayer, ya en la Catedral.    MANU GARCÍA​​​​​​​
Nazarenos de Fátima, pasados por agua, formados en la Catedral.   MANU GARCÍA
Nazarenos de Fátima, pasados por agua, formados en la Catedral.   MANU GARCÍA​​​​​​​

La evolución del cielo señalaba a todas luces que los partes se cumplían. Salir lloviendo es una temeridad por mucho que le susurren al oído del hermano mayor que esto no será nada. Así fue, no fue nada en comparación con la que cayó sobre las 20 horas cuando pasó a chaparrón con Amor y Sacrificio, Candelaria y Fátima -rompió parte de la talla del respiradero del misterio al chocar con un palco- en la calle. Para olvidar.

Hermanos de La Viga sentados en la bancada de la Catedral esperando la decisión de salir o no.   CANDELA NUÑEZ
Hermanos de La Viga sentados en la bancada de la Catedral esperando la decisión de salir o no.   CANDELA NUÑEZ​​​​​​​
El paso del crucificado, ayer, dispuesto en su lugar una salida que no se produjo; por delante pasan nazarenos de La Sed.   CANDELA NUÑEZ
El paso del crucificado, ayer, dispuesto en su lugar una salida que no se produjo; por delante pasan nazarenos de La Sed.   MANU​ GARCÍA

En lo cofrade, La Candelaria se vio con otros aires en su caminar, como quería Paco Yesa que se estrenó como capataz de la cofradía. Por cierto, que a este palio volvieron las esquinas adornadas con centros florales muy a como se veía en la década de los 90 en Jerez. Algo más discutible, en cuanto a su idoneidad, es el monte multicolor que se le instaló al Cristo de la Sed. En Las Paz mal estreno para el dorado de gran parte del canasto. A ver qué consecuencias tiene. Nadie quita mérito al heroísmo costalero de largas chicotás a paso de lluvia y sin resuello, alcanzar refugio. Numantino; podría haberse evitado un espectáculo que causa más pena que otra cosa. Las hermandades no están para que en Semana Santa hagan numeritos como estos.

La cofradía de Santa Ana saliendo cuando cielo pintaba medio bien.   CANDELA NUÑEZ
La cofradía de Santa Ana saliendo cuando cielo pintaba medio bien.   CANDELA NUÑEZ​​​​​​​
Paraguas abiertos mientras salía el palio de La Candelaria. CANDELA NUÑEZ
Paraguas abiertos mientras salía el palio de La Candelaria. CANDELA NUÑEZ​​​​​​​

¿Acertaron Cena y Viga? Sin duda. La madurez pudo sobre el corazón aunque ciertamente hubo tentaciones en ambas en las que salir fue lo que se quiso hacer. Lunes Santo roto por completo, de carreras, de paraguas, de aguaceros, de lágrimas por no salir o por ver cómo la caía la mundial a pasos y nazarenos mientras asistíamos impotentes a tan esperpéntica situación.

Amor y Sacrificio, ayer, cuando conseguía llegar a su templo de regreso de Santo Domingo.    MANU GARCÍA
Amor y Sacrificio, ayer, cuando conseguía llegar a su templo de regreso de Santo Domingo. MANU GARCÍA
El paso de la Virgen abajo mientras que colocaban el capote de lluvia.   MANU GARCÍA
El paso de la Virgen abajo mientras que colocaban el capote de lluvia.   MANU GARCÍA​​​​​​​

 

Sobre el autor:

KIKO ABUIN 1

Kiko Abuín

Periodista.

...saber más sobre el autor

Si has llegado hasta aquí y te gusta nuestro trabajo, apoya lavozdelsur.es, periodismo libre, independiente y en andaluz.

Comentarios

No hay comentarios ¿Te animas?

Lo más leído